Hostal-Restaurante el rey de oros en Cobeña

Cinco estrellas bien merecidas para tres platos que nunca fallan: la oreja, las berenjenas y las setas, auténticas joyas de la carta. Y, por supuesto, para dos camareros que hacen que siempre quieras volver: Miguel e Isa. Profesionales, cercanos y siempre con una sonrisa. ¡Gracias por hacer de cada visita una experiencia tan buena!

Comida espectacular, el conejo en cualquiera de sus especialidades, las hamburguesas y los entrantes, todo riquísimo! La atención exquisita, l@s camarer@s super atentos a todo. Ideal para celebraciones familiares.

La comida es muy buena. Conviene reservar los fines de semana.

La comida buenísima, la atención muy buena y el camarero Miguel, muy profesional, muy agradable y muy atento

Viernes 14 de marzo 2025, (16:00h) Para las personas q hacemos 50.000km al año, q pasamos gran parte del año fuera de casa y del ambiente familiar por trabajo…… Encontrarte un sitio para comer y encontrarte a un profesional detrás de una barra y tratarte con un cariño, con una delicadeza, con una amabilidad especial es de admirar y de felicitar. ( creo q te llamas Miguel), tu jefa tiene una suerte enorme de tener a una persona como tú en su plantilla, aunque llenes mucho las copas de vino con limón, jejejej El Rey de Oros en Cobeña es un lugar con parada obligatoria para comer. Espero volver pronto y pasar a saludaros y comer por supuesto. Gracias por todo.

Comida familiar de 38 personas. Todo facilidades y todo fenomenal. Nos dejaron un salón sólo para nosotros. María encantadora con la organización previa Muchas gracias por todo..

Suelo ir los viernes por el cocido, realmente espectácular.

Un sitio estupendo tendré que repetir con juegos par niños y monitora , escenario para actuaciones y mucho espacio gracias

Un sitio para repetir, buena comida, y muy buen servicio

No muy satisfactoria la situación con los camareros. Fuimos a comer el domingo con mi hija celíaca, cuando a los camareros les pedidos que nos ofrecieran algún entrante sin gluten, titubeaban y nos respondieron que "claro hay mucha gente, está muy lleno y hay que hacer las cosas por separado en la cocina y claro...." Dando a entender que no nos aseguraban que el resultado de la comida fuese sin gluten. Por otra parte, pedimos un poco de ketchup para las patatas de los niños y al traerlo y consultar por el gluten la respuesta fue igual de agradable, que "qué ketchup es sin gluten" y le comenté que ya les habíamos dicho que íbamos con una niña celíaca y que sería importante que lo avisasen, ya que si se contamina podemos terminar en el hospital. En resumen, la comida está bastante bien, pero si tenéis algún problema de alergias o intolerancias pensarlo dos veces no sé si los camareros no lo controlan o no sé quieren preocupar, a pesar de estas especificado los alérgenos en carta y haberles llamado para asegurarnos antes de venir.