Hostal Kimboa en Ansó

Lo reservamos a última hora ya que no teníamos lugar donde hospedarnos, la ubicación en booking estaba mal puesta y al llamar al chico, nos solucionó todo en el momento, nos mandó la ubicación y explicó cómo llegar. El trato desde que entramos hasta que salimos al día siguiente fue espectacular, la habitacion muy limpia y amplia para dos, con vistas preciosas de la montaña y el pueblo. No cenamos allí pero si desayunamos y por 7,50€ súper amortizados, lo cocina el y todo casero. Además le explicamos nuestra situación de por qué estábamos allí en busca de unas zonas de acampada y súper amable nos aconsejó varias zonas para visitar, proporcionándonos incluso números de teléfono. La calefacción a tope, buenísima. La única pega es que tuvimos un grupo en el mismo pasillo que no dejaron de gritar, pegar portazos y correr por el pasillo, pero entendemos que no es culpa del hostal. El mecanismo de las puertas con código nos pareció súper chulo y así te olvidas de perder la tarjeta de la habitación. Nos encantó el trato y el encanto del lugar y la familia que lleva adelante este establecimiento.

Emos estado una noche de paso haciendo una ruta en moto y súper bien habitaciones muy correctas y limpias comida muy buena y muy amables

Me hospede una noche con un amigo después de bajar de la montaña y la verdad que muy bien. Habitación cómoda acogedora y limpia, propietario muy agradable el cual nos informo de todo. El pueblo precioso.

Hemos estado pasando el fin de semana. No suelo escribir reseñas normalmente. Pero este lugar merece la pena de verdad. La pareja que lleva el negocio lo hace desde el corazón y se nota que ponen ganas en casa gesto y gestión que llevan a cabo. Es un placer conocer sitios como este gestionados con tanto cuidado y tanta coherencia. Ojalá podamos volver a disfrutar de vuestro lugar acogedor. Gracias.

Todo excelente, tanto el hostal (habitación muy cómoda) como el restaurante (comida casera espectacular). No acostumbro a poner reseñas pero en el hostal Kimboa se lo merecen. Hospitalarios, muy amables y buenas personas. Durante mi estancia, no dudaron en ofrecerme un plato extra vegetariano que no incluyen en el menú, a pesar de ya tener opciones de por sí. Así da gusto. Por estas pequeñas cosas, su buen humor y mostrarse siempre tan cercanos se nota la calidad humana de ambos. Sin duda, esta será mi elección cuando vuelva por la zona. Gracias por una estancia en Ansó inmejorable y por todo (y por el mejor salmorejo que he probado).

Hemos estado una setmana de vacaciones y todo ha sido genial. La comida buenisima, postres caseros exquisitos, la habitación amplia, luminosa y superlimpia. Álvaro y su mujer, són encantadores y cada dia nos recomendaban lugares para visitar que cumplieron todas nuestras expectativas. Volveremos sin duda.

Habitaciones sencillas pero muy cuidadas y limpias han hecho cómoda la estancia. Fantástica la atencion de Alvaro y su esposa ( perdon por no recordar su nombre). Han sido muy amables en todo momento. La terraza espectacular para cenar al fresco. Muy buenos todos los platos que comimos, calidad en materia prima y preparados con mimo en especial la carne. Los desayunos completos en buffet libre. Las madalenas y bizcochos son hechos propios. Muchas gracias por hacernos sentir tan a gusto.

Todo perfecto, habitación completa y limpia, los dueños son muy cercanos y te ayudan en lo que necesites. Aconsejo comer en el Hostal, comida es casera, espectacular. El pueblo y el entorno una pasada. Si vuelvo a visitar esta zona del Pirineo, me hospedaré aquí sin duda.

Muy buena experiencia. Habitaciones muy cómodas. Muy atentos y muy amables son fáciles. Puedes desayunar y cenar en el mismo hostal. Ansó es guapo y con muchos servicios.

Mientras recorríamos la ruta Adventure Country Tracks Pyrenees pasamos la noche en Hostal Kimboa. Las habitaciones son cómodas y bien equipadas. Nuestros anfitriones eran muy acogedores y serviciales. La cena fue excelente con una selección de platos regionales, y era muy razonable precio.