Bienvenido a GOIKO Gluten Free, donde el gluten se va, pero el sabor se queda. Las burgers de siempre y con los ingredientes más top de GOIKO, en un espacio pensado para que celíacos, intolerantes y foodies vivan la experiencia al 100%.
¡Muy recomendable! La comida estaba muy buena, sin diferencias con un Goiko normal. Quizás, lo único que notamos fueron los precios. Un poco más caro que un Goiko normal.
Jazmín estuvo muy atenta y se mostró muy amable con nosotros.
Descubrir la propuesta 100% gluten free de Goiko ha sido una sorpresa increíble. Me encanta poder decir que, por fin, hay un lugar donde se puede disfrutar de la misma calidad y sabor característicos de Goiko, pero sin preocuparse por el gluten. ¡Y vaya si lo logran!
La comida estuvo espectacular. Todos pedimos hamburguesas diferentes y cada una se destacó por su sabor, la jugosidad de la carne y lo bien logrados que están los panes sin gluten. Se nota que hay un verdadero trabajo detrás para ofrecer una experiencia completa, no solo una versión “adaptada”.
Pero si algo me dejó realmente impresionada fueron los tequeños sin gluten. Están tan buenos que cuesta creer que no tengan gluten: crujientes, sabrosos y con ese queso fundido perfecto por dentro. ¡Una locura total!
Además, el ambiente del lugar es muy agradable y el personal fue atento y amable, lo que hizo que la experiencia fuera todavía mejor. Sin duda, este Goiko se convertirá en uno de mis lugares de confianza para venir con amigos o familiares que no pueden comer gluten, y también para recomendar a cualquiera que simplemente quiera comer bien.
En resumen, una experiencia redonda: comida excelente, atención amable y la tranquilidad de poder disfrutar sin preocupaciones.
De agradecer que haya hamburguesas más saludables con pan sin gluten aceptable y no chicloso. Sigue siendo comida de calorías no fácil de digerir pero si es una excepción puede ser una buena idea. Repetiremos una vez al año.
Regular. Es estupendo que hayan abierto un restaurante sin gluten, pero el pan estaba duro como una piedra, la parte de arriba comible, pero el de abajo se deshacía a trozos de la dureza.