Ven a Ginos Alcorcón, en Alcorcón, y disfruta de la mejor comida italiana en Madrid. Nuestros platos de pasta y pizza están hechos al momento con ingredientes de primera calidad traídos de italia. Recetas de auténtica cocina italiana, pizzas artesanales elaboradas por pizzaiolos en nuestro horno de piedra y de nuestra variedad de platos de pasta fresca. Si eres de los que prefieren disfrutar de Ginos en casa, descubre Ginos a domicilio en Madrid y nuestro servicio de comida para recoger. El sitio perfecto para planes con amigos y comidas familiares con menú infantil para niños. ¿Eres de los que usa la funcionalidad restaurantes cerca de mi? ¡Has encontrado tu restaurante italiano!
Pedimos del menú del día ensalada con berenjena y no nos avisaron que no había berenjena, nos cambiaron el plato, la pizza estaba un poco fría, el postre que queríamos tampco tenian
Una Experiencia Gastronómica Italiana Inolvidable
Desde el momento en que crucé la puerta de Ginos Parque oeste supe que estaba ante un establecimiento que trasciende lo ordinario. Cada detalle, desde la acogedora decoración hasta el aroma embriagador a fetucinni pirata , anticipaba una velada excepcional. fue el servicio impecable —en particular el de Raquel, la talentosa profesional de la barra, lo que elevó la experiencia a un 10
Raquel no solo desempeña su labor con precisión técnica, sino que lo hace con una calidez y discreción que reflejan un dominio absoluto de su arte
La cocina, por supuesto, es el alma del lugar. Los *gnocchi rellenos de setas con ragú de carrillera eran una obra maestra de textura y sabor, mientras que el sorbete Dolce Vitta ,presentada con elegancia y sencillez dejó un final sublime. Pero incluso los platos más exquisitos palidecen ante un servicio mediocre, y aquí radica la grandeza de Ginos parque Oeste : la simbiosis entre cocina y sala es perfecta.
Recomendar este restaurante es un deber para cualquier amante de la auténtica cocina italiana. Y si tienen la fortuna de ser atendidos por Raquel comprenderán que el verdadero lujo no está en el mármol ni en el oro, sino en el arte de su atención