En el corazón de Madrid, en el edificio de los antiguos almacenes Arias se encuentra Ginger, un restaurante con un look muy chic y un cierto aire retro, muy de moda entre los locales y siempre lleno de vida.
Dispone de Viernes y Sábado DJ's y música en directo de 20:30 a 00:00
Un clásico que evoluciona su carta de esencia mediterránea incorporando sabores asiáticos, italianos, sudamericanos, nórdicos, … Pero siempre desde los productos frescos y de proximidad. Evolución tranquila de una gastronomía de fondo.
Disponemos de menú del día de lunes a viernes laborables (mediodía), o nuestro menú de noche y fin de semana.
¡Ven a disfrutar!
Bien,pero me esperaba más, ambiente agradable, rapidez en la comida,todos empleados muy amables,pero la cantidad en los platos comparado con el precio,yo esperaba algo mas
Restaurante muy céntrico, con buen ambiente. Pedimos el menú del día que eran 14,95€, el precio básico, al que añadimos 0,50€, por cerveza tercio y un caso 5.95 por el extra de lomo de bacalao, lo cual mereció la pena pues estaba buenísimo. El resto de los platos abundante y buenos. La relación calidad precio, me parece excelente. En muchos restaurante solo por el pan y la bebida te pueden carga ya 7-8€.
Es cierto como dicen algunos que te sirven la comida muy rápidamente, pero ello es debido a que la mayoría de los clientes piden el menú, lo cual disminuye extraordinariamente el tiempo que tarda en servirte.
Lo único que no me gustó (voy en silla de ruedas) es que los servicios están en un sótano.
Como comentario general y no referido a este caso, señalar que cada vez que vengo a Madrid me sigo sorprendiendo de la cantidad de establecimientos de hostelería a los que no se puede acceder por tener un escalón a la entrada. Y esto año tras año no mejora.