Fraula restaurante en Valencia

¡Una auténtica experiencia Michelin! La comida fue una explosión de sabores, maridada con maestría con vinos que realzaron cada plato. Los ingredientes locales y de temporada brillaron, especialmente el pescado y el cangrejo. El servicio fue profesional y amable. Fraula Valencia es una experiencia gastronómica inolvidable.

Celebramos el cumpleaños de mi marido con una semana de menús degustación. Estábamos entusiasmados con este pequeño menú degustación con estrella Michelin para un viernes por la tarde sin niños. Empezó con lo que creíamos un aperitivo, pero en realidad fueron los dos primeros entrantes. El pescado estaba delicioso y el jabalí estaba seco. Además, a mi marido se le metió un trozo de papel de aluminio en el jabalí al cortarlo. Sin disculpas. Me decepcionó. El postre fue emocionante y divertido, además de delicioso con diferentes variedades de chocolate. El cava estaba exquisito, al igual que el vino blanco "fresco"; el vino tinto es un vino que tengo en casa. Así que felicitaciones a nuestra bodega local por comprar un vino excelente servido en un restaurante con estrella Michelin.

Magnífico. A este precio, la mejor comida de la ciudad, rivalizando con restaurantes mucho más caros. Cada plato es delicioso y exquisito. La carta cambia con frecuencia. El almuerzo por 65 € es una ganga, y siempre parece haber mesas disponibles. A pesar de tener una estrella Michelin, este lugar parece estar completamente infravalorado.

Magnífico restaurante con estrella michelin merecida, comida excepcional bien elaborada y con esmero, una delicia para el paladar; muchísimas gracias por la atención

Mi esposa y yo hemos disfrutado de una comida y un servicio excelente. El menu Fraula ofrece unos platos deliciosos donde la combinación de excelentes verduras, pescados y carnes es muy equilibrada. Lo recomiendo al 100%.

La experiencia ha sido extraordinaria. Pensando en que igual era demasiado reservamos el menú corto, ahora tengo ganas de probar el largo 🥰, ya que me encantó. Recomiendo el restaurante, el servicio fue de 10. Los platos en un tiempo super coordinado, volveré!😊

Comida y servicio excepcionales. Todos los platos estaban riquísimos y muy bien presentados. ¡Un sitio muy recomendable si estás en Valencia!

Cumple las expectativas, vale lo que cuesta, comida original, riquísima, una carta de vinos infinita y espectacular y un servicio muy bueno

Llevaba con Fraula en mente antes incluso que le dieran la estrella Michelín y finalmente pude ir acompañado. El local es luminoso, no muchos meses, pero tampoco íntimo, de tonos blanco con luz, tirando a modernista, pero tampoco me sorprendió el espacio. Lo primero es la atención, me sorprendió para bien, no esperaba menos de un sitio tan renombrado , bien atendidos en todo momentos y los camareros amables y a la altura del espacio y la gastronomía. En nuestro caso nos decantamos por el menú Alfábega, el menú con los pasos intermedios. Empezamos los pases con una tosta de brandada, un buñuelo de calabaza y de trufa y un flan de castañas y moscatel, todos diferentes, buenos sabores para comenzar la noche. Seguimos con algo diferente, una textura de espárragos blancos, yo que no soy muy ducho, la definiría como una sopa de espárragos blancos con una textura más cremosa, diferente en sabor. Seguimos con algo tan de temporada y tan valenciano como las alcachofas, una tarta de alcachofas, la recuerdo rica, diferente, sin duda. Pero lo que hay muy valenciano es el arroz, en este caso se salieron del habitual, con un arroz de buey de mar con tomates semisecos, estaba muy bien de sabor, me resulta un poco extraño en una cena pero la verdad que el plato merecía la pena. Seguimos con el plato de cebolla dulce, morteruelo, una especie de guiso de la zona de Guadalajara con carne de caza que de sabor también volvía a estar genial, he de reconocer que no lo había probado antes. Por último, sacaron otro buen plato, con pichón de caserío y zanahorias baby, un plato diferente. Un sitio diferente con propuestas poco vistas, acorde al servicio y la atención.

Fui a este restaurante en mi última noche en Valencia. Elegí el menú Fraula y no me arrepentí ni un segundo. Todos los cursos eran geniales, lleno de sabor. Los propietarios y los otros miembros del personal que conocí, también eran realmente increíbles y conocedores. Con todo, tuve una velada absolutamente maravillosa para recordar durante mucho tiempo.