Forn Puiggròs en Barcelona

Lugar fantástico, con el que para mi es el mejor cruasán de chocolate de bcn, el local es precioso y el producto de lo mejor, absolutamente recomendable.

Si estás en Barcelona y te encantan las panaderías, Forn Puiggròs es una necesidad absoluta. Sus pasteles son perfectos, los mini croissants rellenos de crema pastelera son mi debilidad. Son ligeros, mantecosos y rellenos de la cantidad justa de crema, verdaderamente irresistibles. Y si eres un amante del chocolate, su versión de chocolate es igualmente divina (puede que solo necesites conseguir ambos, confía en mí). Pero mi golosina favorita aquí es el pan dulce con manzana. Las capas mantecosas, las delicadas rodajas de manzana caramelizadas bien, y la sutil dulzura lo convierten en el pastel perfecto. Combínalo con un expreso fuerte y tendrás la manera ideal de empezar tu mañana en Barcelona. ¿La mejor parte? No tienes que parar en el desayuno. Siempre recomiendo tomar uno de sus bocadillos frescos en pan casero para disfrutar más tarde en el día, o recoger uno de sus panes artesanos para saborear en casa, simple, rústico y delicioso incluso por su cuenta. Forn Puiggròs no es solo una panadería, es un ritual. Ve por la mañana, disfruta de algo dulce con tu café y vete con pan que hará que el resto del día sea aún mejor.

Gran hospitalidad, buen café, buen croissant... Abre temprano por la mañana.

Me quedé en la misma calle una semana. Compraba café y pasteles todas las mañanas. Había mucho para elegir y el personal era amable, especialmente la mujer de pelo corto teñido que hablaba bien inglés.

Muy Caro 5 cruasant de chocolate 6,75€ y duros de minimo 1 dia

Servicio atento, amable y paciente. Hablan inglés y ofrecen café y comida deliciosos.

Un buen lugar para parar (tanto al aire libre como en el interior, este último muy tranquilo). Café Illy, imprescindible para un italiano en el extranjero, buenos cruasanes, servicio relajado y sin esperas, todo a un paso de la Sagrada Familia. Recomendado.

Es mi primera vez en Barcelona y había muchísima variedad de comida, pero esto me pareció más apetecible, así que vine aquí. El dueño es un hombre encantador, amable y paciente que habla varios idiomas y recibe a todos los clientes con la misma calidez. Me explicó el menú con paciencia y me recomendó la mejor comida que he probado desde que llegué a España. Los platos parecen sencillos, pero los sabores son intensos. Quería hacerle saber cuánto aprecié su comida, pero los clientes estaban llegando, así que espero que sepa que le agradezco. Pedí horchata (¡que no sabía que solo se bebía en verano!), torrada de pagé (jamón ibérico) y ensalada (con queso, nueces, almendras y aceite de oliva). Quien venga a España tiene que probar la comida de Forns de Pa Puiggros ♥️

Una panadería y cafetería favorita de todos los tiempos, tanto para locales como para visitantes. Puiggros es un negocio familiar tradicional que conserva el ambiente acogedor de las antiguas panaderías catalanas. Muy popular entre familias, grupos de amigos y turistas, sigue siendo un lugar frecuentado principalmente por vecinos y habitantes de la ciudad. El servicio es rápido y combina servicio en mostrador y a la mesa si su pedido tarda más en prepararse. Hay una sección de panadería y una cafetería típica con platos calientes, ensaladas y los típicos cafés y sándwiches. El pastel de zanahoria es exquisito; los cruasanes con jamón y queso también son muy buenos y populares, y también tienen pequeños menús de ensalada y tortilla, piafinas, sándwiches y huevos fritos con beicon y pan con tomate. La decoración es clásica, retro, casi vintage, sin adornos extravagantes y llena de detalles antiguos como perchas para abrigos y la diversidad de estilos de mesas y sillas.

Horno de pan familiar con producto de buena calidad. Sin embargo, cuando no existe el “jefe” el trato es muy mejorable. Lástima que desde hace un tiempo el servicio ya no te atienda en Catalán porque algunas de las personas trabajando ni lo hablan ni hacen el esfuerzo de entenderlo. Un poco triste que en un horno con más de 30 años de trayectoria no se pueda atender con tu lengua.