Fonda Farré en Soriguera

El restaurante está muy bien. Menú de 22€ súper recomendable

Todo excelente, trato por el personal (Farre y Mayra increíble) desayuno perfecto, habitación muy limpia y grande. Muchísimas gracias✨

Una bienvenida muy cálida. El dueño nos informó sobre lugares hermosos para visitar. La habitación estaba muy limpia y tranquila. La cena fue excelente. Buena relación calidad-precio. Una región montañosa muy hermosa para visitar, con magníficos colores otoñales.

Vamos de trabajo y nos alojamos una noche. Bien, silencioso y tranquilo, trato muy amable y excelente precio. Pero lo alucinante fue el maravilloso desayuno con que nos sorprendieron por la mañana. Una bandeja grande con diez tipos de fiambres y longanizas sabrosísimos u otra bandeja igual de frutas (principalmente diferentes manzanas y unos preciosos higos) todo cortado en gajos y excelentemente presentado. Café bien preparado y pan tostado para untar con ajo, tomates enteros y maduros, aceite. Y lo mejor, una maravilla de tortilla recién hecha, con estupenda patata y cuajada en su punto (con lágrimas). Qué suerte alojarnos en la Fonda Farré

Todo muy bueno y cuidado de 10.

⸻ Una experiencia gastronómica excelente de principio a fin. La calidad de la comida es sobresaliente, con productos frescos y de proximidad que marcan la diferencia en cada plato. Se nota el mimo en la elaboración, el equilibrio de sabores y la presentación cuidada. El servicio está a la altura de la cocina: cercano, atento y profesional, siempre pendientes de cada detalle sin resultar invasivos. Todo funciona con una coordinación impecable, lo que hace que la experiencia sea aún más agradable. En definitiva, un restaurante que combina calidad, cercanía y buen hacer, convirtiéndose en un lugar imprescindible para quienes valoramos la buena mesa. Sin duda, un sitio para recomendar y repetir.

Fuimos a comer con mi familia. Espectacular!!! Combinación de sabores,platos súper bien presentados e increibles. Además yo soy celíaca y me he sentido como en casa, adaptándome platos y poniéndolo todo súper fácil para poder comer sin gluten. Hemos salido todos súper satisfechos de la elección. El local es muy espacioso y con una bonita decoración. Personal muy amable y atento. Repetiremos seguro!

Gran descubrimiento, suerte que no nos dieron mesa en el restaurante de al lado y pudimos probar la cocina de la Fonda Farré, platos muy bien presentados, la torta de foie bonissima y el solomillo espectacular, el servicio muy amable de 10!! a partir de ahora parada obligatoria, ¡hasta pronto!

Habitaciones impolutas y cómodas. Dormimos súper bien. Tienen su baño con ducha, papelera, televisión, mantas por si hace frío, ventana con vistas... Un servicio que mayoritariamente está llevado por su propietario, que siempre estuvo atento. Se nos desconfiguró la tarteja magnética para poder entrar a la habitación cuando volvíamos pasada la media noche y el mismo dueño cogió el teléfono y bajó a volver a configurarla en menos de 10 minutos con la más absoluta comprensión. El desayuno es todo lo que debería ser. Atienden rápido, está bueno y en buena cantidad. Además cada día servían adicionalmente algún tipo d pasta dulce para acompañar los huevos, bacon, o lo que sea que pidieras del día. La decoración es sencilla y rústica, pero bonita, no sé ve anticuado ni dejado. Si bien tiene lo justo y necesario ya que no se encuentra en un pueblo con muchas cosas que ver (para eso hay que moverse a los pueblos de alrededor o ir de excursión al campo), esta fonda no tiene nada que envidiarle a muchos supuestos "grandes hoteles" de cualquier zona rural o montañosa. Absolutamente ninguna queja con nuestra experiencia. Si abres la ventana se oye el río, que para dormir es perfecto si no hace demasiado fresco. El sitio es tranquilo.

Paramos aquí a desayunar durante nuestro viaje en bicicleta (desde Escocia). La comida estaba buenísima y a muy buen precio.