El Rincon de Esteban en Madrid

⭐⭐⭐⭐⭐ El Rincón de Esteban: tradición y sabor en el corazón de Madrid ⭐⭐⭐⭐⭐ El Rincón de Esteban es uno de esos restaurantes que representan a la perfección la esencia de la buena cocina madrileña 🍽️❤️. Desde que entras, el ambiente es acogedor, elegante y tranquilo, ideal tanto para una comida especial como para disfrutar de una velada relajada en pleno centro de Madrid. La calidad del producto es excepcional 🥩🐟. Cada plato está elaborado con ingredientes de primera y un respeto absoluto por la cocina tradicional, pero con una ejecución impecable que marca la diferencia. Todo está lleno de sabor, bien presentado y en su punto justo, demostrando la experiencia y el saber hacer que caracteriza a este restaurante. El servicio es otro de sus grandes puntos fuertes 👌. El personal es profesional, atento y muy cercano, siempre pendiente de cada detalle y ofreciendo recomendaciones acertadas que hacen que la experiencia sea aún más completa. Se nota el cuidado y la dedicación por ofrecer un trato de primer nivel. Además, el ambiente tranquilo permite disfrutar de la comida sin prisas, algo cada vez más difícil de encontrar en el centro de la ciudad 🍷✨. Es un lugar perfecto para conversar, celebrar ocasiones especiales o simplemente darse un buen homenaje gastronómico. En definitiva, El Rincón de Esteban es sinónimo de calidad, tradición y excelencia. Un restaurante muy recomendable para quienes buscan buena cocina, producto de primera y una experiencia que deja ganas de volver. ⭐⭐⭐⭐⭐

Una de las mejores experiencias que he tenido en toda España. He estado en muchas ciudades y restaurantes por toda España. Las camareras fueron muy amables y el dueño vino y nos hizo sentir como en casa. La comida estaba deliciosa, una de las mejores paellas que he probado. Sin duda, recomiendo el pulpo. Muy buenas noches y recomiendo este lugar al 100%.

Una decepción, el personal hizo todo lo posible, pero la comida fue decepcionante. Comimos gambas al ajillo como entrante, el mejor plato, pero le faltaba algo de sabor. Mi esposa pidió rodaballo, terrible... Yo pedí un pescado relleno de carne de cangrejo... normalito en el mejor de los casos... Mucha salsa sin sabor, pero sin arroz ni cuchara para recogerlo.

INCREIBE, la comida muy bien, elaboración e innovación, todo sin descuidar la calidad. Johan nos hizo sentir como en 🏡. Si quieres comer bien, al lado del Congreso y en un sitio con mucha historia...... "El Rincón de Esteban"

Un gusto como siempre. Llevamos años celebrando la cena de Navidad en este restaurante y, sinceramente, nunca decepcionan. Cada visita es mejor que la anterior. El ambiente es acogedor, el servicio es impecable y siempre nos hacen sentir como en casa. Quiero destacar especialmente la atención del metre Johan. Su profesionalidad, simpatía y dedicación hacen que toda la experiencia sea todavía mas especial. Recuerda nuestros gustos, está pendiente de cada detalle y nos trata espectacularmente bien, como pocos sitios saben hacerlo hoy en día. La comida es otro nivel, deliciosa, bien presentada y en buena cantidad. Da gusto venir, además de lo limpio que está todo. Un sitio más que recomendable.

Tuvimos una experiencia increíble aquí. El servicio fue excepcional y la comida estuvo increíble de principio a fin. El ambiente cálido también fue encantador. ¡Lo recomiendo muchísimo!

Visité el restaurante recientemente y quedé encantada con la experiencia. El servicio también merece una mención especial. El personal fue atento, amable y siempre pendiente de que no faltara nada en la mesa, lo que hizo que la velada resultara aún más agradable. Además, el ambiente del restaurante es acogedor, con una decoración antigua. Es el tipo de sitio al que te apetece volver, ya sea para una comida tranquila o una cena especial. En definitiva, una experiencia deliciosa en todos los sentidos. Muy recomendable.

Muy buen atención y comida de calidad!!!!

Este es un restaurante muy acogedor, y el personal es Recibimiento y atento. Nuestra mesa INTERIOR fue acosada por una docena de diminutas moscas. Mataríamos a uno y otro aparecería. El pulpo a la parrilla era excepcional. El estante de cordero no lo era. Estaba frito y tenía poca carne, que no estaba demasiado cocido. El rodaballo a la parrilla (¡y el cordero!) estaba mal descrito y llegó como un pez entero (menos la cabeza y la cola). Nunca lo hubiéramos ordenado si lo hubiéramos sabido. Las moscas nos volvieron locos y no podíamos salir lo suficientemente rápido.

Un restaurante muy acogedor, con un ambiente familiar que crea un ambiente reconfortante. Atendido por el propietario, e inmediatamente se llega a sentir su pasión y orgullo en su restaurante y su personal. La comida era excelente y la elección del vino por el propietario era el lugar. Muy recomendable.