El Parque de Trueba en Santander

Enhorabuena por el arroz al señorito. Deseando volver

El pincho de tortilla con atún muy bueno

Un estupendo lugard donde comer, tapear al borde de la playa del Sardinero de Santander. Fantasticas vistas y una amplia terraza.

Familia Trueba Allá por los años sesenta Don Basilio Trueba Diego, propietario de una bodega en la santanderina calle Ruamayor, adquirió unos terrenos ganados al mar por Don Manuel García Lago en el final de El Sardinero, que por aquel entonces era sólo una escombrera. En los años siguientes se construyó poco más que unas tejavanas donde se vendía vino y algunas cazuelitas que con esmero y buen hacer elaboraba Doña María Lastra. No fue hasta bien entrados los años setenta cuándo se construyó el edificio en el que hoy se haya el restaurante, ya con la inestimable ayuda de la hija de Don Basilio, Doña Mary Trueba y de su difunto esposo Don Alejandro Heras. En nuestros días es la tercera generación de la familia Trueba la que regenta el establecimiento, así: · Don Basilio Heras, campeón mundial de coctelería acrobática y uno de los diez mejores bartenders del Mundo es nuestro Jefe de Bares. · Doña María Heras, con una dilatada experiencia en atención al cliente, siempre con la amabilidad y candidez que la caracterizan, es nuestra Jefa de Sala. Siempre acompañados de un gran equipo humano, preparados para esta etapa en la que el Restaurante El Parque de Trueba pretende ser uno de los estandartes de la cocina de Santander y Cantabria.

De nuevo visité el Parque de Trueba...De nuevo a comer el Chopito... En ningún restaurante lo cocinan así... Fui a tomar el aperitivo...pero la simpatía, dulzura y poder de captación del Alma del Restaurante, Maria, nos ánimo a quedarnos a comer. Todos los camareros te facilitan la estancia. Volveremos. Modesto Martín Gutiérrez

Hemos ido hoy a comer , día de Reyes , sin reserva y tarde , y nos han atendido con una sonrisa . Hemos comido genial . El precio alto pero es más que evidente que si quieres comer bien de calidad , tienes que pagar eso ! Un sitio para repetir

Comida de Reyes con la familia. Rincón con unas vistas únicas. La comida estupenda y con una presentación impecable.

¡Gran lugar para una cerveza y calamares fritos! Los precios son un poco altos, pero aún así vale la pena. ¡Es un gran paisaje!

Un lugar donde encontrarse con la familia. Salió un día especialmente soleado. La atención, excelente. Volveremos

Buen sitio para comer con vistas a la playa de El Sardinero, buen producto y buen servicio. Ambiente familiar y agradable.