El Mirador del Paseo en Barcelona

Edificio modernista de 1908 obra de Lluís Domènec i Montaner al final justo del Paseo de Gracia. Es un hotel de gran lujo de 5 estrellas, aparte tiene un restaurante del mismo nombre con mucho renombre en la ciudad. Dispone de una terraza con mirador sobre la ciudad con mesas para comer. El edificio desde la calle es ya precioso y muy cuidado.

¡Estancia mágica en el hotel Casa Fuster! Idealmente situado en lo alto del Passeig de Gràcia y a caballo entre el barrio de Gràcia. Habitación doble comunicada de calidad. Servicio y personal impecables. Magnífica arquitectura. Muy bonita azotea. Sólo el servicio de habitaciones no estaba a la altura (calidad de los platos). Gracias por esta estancia.

Me quedé aquí hace unos años. El ambiente del hotel, las habitaciones, el servicio, la comida, todo fue excelente. Me gustaría visitar de nuevo.

Todos los jueves una orquesta de Jazz en el Salón Vienés de 21 a 21 horas. a 11 p.m. Magnífica decoración y ambiente ad hoc.

Fue un gran hotel que era conveniente para ir a cualquier parte. Huele bien desde que entras al hotel.

Alojarse en Casa Fuster fue realmente una experiencia inolvidable. Este icónico hotel combina la grandeza histórica con el lujo moderno, ofreciendo un ambiente elegante y acogedor. Desde el momento en que llegamos, el personal nos hizo sentir como invitados de honor: su atención al detalle y su calidez genuina marcaron la pauta de nuestra estancia. La terraza de la azotea fue lo más destacado: una escapada serena con vistas panorámicas de la ciudad, una elegante piscina y una acogedora sala de estar perfecta para tomar un cóctel al atardecer. El desayuno de cada mañana era una delicia y ofrecía una amplia variedad de selecciones frescas y de alta calidad en un hermoso entorno. La ubicación es ideal para explorar Barcelona: a poca distancia de muchas de las principales atracciones de la ciudad, tiendas exclusivas y maravillosas opciones gastronómicas. En general, Casa Fuster es la opción perfecta para los viajeros que aprecian la historia, la arquitectura y el servicio impecable. ¡Estamos ansiosos por volver!

Utilicé la cafetería en este espacio del Modernismo. También hay una actuación de piano, para que puedas pasar un rato relajante en un café al estilo muy europeo. El rico fluir del tiempo parece hacernos olvidarnos de nosotros mismos y recordarnos la rica forma en que la gente pasaba su tiempo en aquel entonces.

Aunque no era una habitación de muy alto rango en el hotel, era lo suficientemente cómoda con todas las instalaciones. Durante el día pude disfrutar mucho de España caminando por el barrio, comprando y visitando bares. Me gustaría quedarme allí de nuevo si tengo la oportunidad.

Un servicio exquisito, aunque algo caro pero ya se entiende. Me volvería a alojar aquí, muy comodo!

El edificio es precioso… las habitaciones están fenomenal y la atención muy buena