El Medio Lleno en Gijón

Muy buen sitio , en muy buena zona

Este restaurante en Gijón destaca por su comida sabrosa y un servicio ágil y amable. Cada visita promete platos deliciosos y bien preparados. El precio medio por persona, incluyendo primero, segundo y postre, oscila entre 45-50 €. Un lugar perfecto para disfrutar de una experiencia gastronómica increíble .

El steak tartare, delicioso...el lomo de venao muy rico; añadiría más boletus y quiatría el toke del puré de calabaza.La lasaña de rabo, increíble!!!De postre arriesgamos con la espuma de curry sobre helado de coco, estaba rico pero no me terminó de encajar y quedé con ganas de la tarta de chocolate...será para la próxima!! Ah, la atención de las camareras fué correcta, profesional y según marca el protocolo.Vamos, un placer comer allí !

Este restaurante en Gijón destaca por su comida sabrosa y un servicio ágil y amable. Cada visita promete platos deliciosos y bien preparados. El precio medio por persona, incluyendo primero, segundo y postre, oscila entre 45-50 €. Un lugar perfecto para disfrutar de una experiencia gastronómica increíble .

Buen sitio, acogedor, comida bien elaborada y bien presentada, la atención del personal excelente, si los precios fueran un pelin más bajos sería perfecto.

El paraíso en Gijón del buen vino a precios razonables. La carta estupenda y el trato inmejorable. El otro día fuimos exclusivamente a probar un vino Remelluri, pero de denominación Ribera del Duero- no su clásico Rioja - y quedamos impresionados. Para repetir. ⭐⭐⭐⭐⭐

Excelente servicio y excelente comida

El Medio Lleno, Gijón: Una Experiencia que Reescribe el Sabor. En el dinámico paisaje culinario de Gijón, El Medio Lleno emerge como un enclave de alta gastronomía donde la creatividad y la técnica se entrelazan con una elegancia natural. Este restaurante es un homenaje a la cocina contemporánea, que logra mantener un delicado equilibrio entre la tradición asturiana y una perspectiva global. Desde la primera entrada hasta el último postre, cada plato es una declaración de intenciones. Aquí no se busca simplemente alimentar, sino narrar historias. Los sabores, meticulosamente orquestados, sorprenden al comensal con contrastes y armonías que muestran un conocimiento profundo de los ingredientes y su potencial. Las técnicas modernas, empleadas con maestría, enriquecen la experiencia sin distraer de la esencia de cada producto. El ambiente es igualmente cautivador: una combinación de sofisticación minimalista y calidez local. La atención al detalle, desde la disposición de los platos hasta la iluminación cuidadosamente medida, convierte cada visita en un ritual que trasciende lo gastronómico. El servicio merece una mención aparte: profesional, cercano y Además, la atención a las necesidades individuales de los comensales, como las opciones para intolerancias alimentarias, es un testimonio del compromiso de excelencia del restaurante.

Nos ha encantado todo: el local, la atención del personal y los platos! Un acierto seguro

Eramos cuatro. Sin reserva. Nos dieron una mesa en el comedor. Comodos. Manteleria papel. Nos atendieron rapido. Carta no demasiado amplia pero suficiente. Tenian alguna cosa fuera de carta. Carta de vino extensa. Pedimos un entrante para compartir y luego un principal cada uno. Entrante: Dos de Puerros con salsa de alioli de merluza. Nos gusto mucho a todos. Excelente presentacion. Prinicpal. Callos al estilo de la reme, acompañados por cuadraditos de patatas fritas. Los callos para comer con cucharita. Muy sabrosos. Bebidas: Una de vino LA PLANTA. Agua y tres cafes. El servicio y tempo de los platos perfecto. Salimos a 32 e/pax. Buena relacion calidad/precio.