El huerto de Roque en Burgos

Buenas cocina, cantidades adecuadas y precio correcto. Toño y resto del personal han sido muy amables. Para volver.

La experiencia en El Huerto de Roque fue, en líneas generales, positiva, aunque con matices. La comida es de buena calidad, con productos cuidados y bien elaborados, aunque no llega a sorprender ni destacar especialmente en creatividad o sabor. Un buen detalle es que sirven agua filtrada en botella sin necesidad de pedirla, algo que se agradece. El pan frito artesano, de estilo casi como de leche, es bueno, original y sabroso. Además, la cantidad del menú degustación es generosa, lo cual da sensación de saciedad y buen aprovechamiento. En cuanto a aspectos a mejorar, hay varios detalles que restan puntos a la experiencia. Por ejemplo, no se retiran los cubiertos entre plato y plato, lo que resulta poco adecuado para un menú degustación. Además, los platos no se explican al ser servidos, algo importante cuando se trata de propuestas gastronómicas que pretenden transmitir una idea o experiencia. La cocina está abierta y de cara al comedor, lo que implica escuchar constantemente el ruido de la plancha, algo que puede incomodar en determinados momentos. La ambientación no ayuda tampoco demasiado: el restaurante estaba muy lleno, con música alta y un ambiente algo caótico. La explicación del menú fue confusa, y el camarero que nos atendió no mostró demasiada paciencia, lo cual afectó a la sensación general de acogida. Eso sí, demostró buenos conocimientos en vinos. Por último, algunos platos como el rape daban la impresión de no ser frescos, y echamos en falta recetas o ingredientes más representativos de la comarca, que ayudarían a dar una identidad más local y auténtica al menú. En resumen, un restaurante con potencial, pero que deberían cuidar mejor los detalles para ofrecer una mejor experiencia.

Unos amigos nos llevaron a cenar a este peculiar Restaurante, en pleno centro de Burgos muy cerca de la Catedral. La cena consistió en un Menú de temporada 4 pasos, consistente en: Aperitivo, dos entrantes de temporada, un segundo plato a elegir entre pescados o carnes seleccionadas, postre (nos gustó mucho) y bebida. Tuvimos una agradable velada y resaltamos el servicio que fue bueno.

Reservamos para el almuerzo del sábado durante una estancia de 2 noches en Burgos. No puedo decir suficientes cosas maravillosas sobre este restaurante estilo granja a mesa. Los platos eran creativos, los sabores increíbles y el servicio excepcional. Si bien el anfitrión dijo que no hablaba inglés, fue muy atento al explicar las ofertas del menú. Es un precio fijo de tres platos, pero con un aperitivo y 2 entrantes eran más bien 5 platos por 35 euros. Excepcional. ¡No puedo recomendar lo suficiente! ¡La mejor comida de todo nuestro viaje! ¡Gracias!

Una experiencia gastronómica increíble, platos perfectos, bien ejecutados con productos de calidad, originales y de alto nivel. Fuimos un grupo de amigos y nos encantó cada plato que probamos. El camarero aparte de ser un gran profesional, fue súper simpático y nos hizo sentirnos super agusto. Destacar también que el chef se pasó a saludarnos, así como el resto del personal que fue muy profesional. Sin duda para repetir mil veces! Gracias!

Muy bien. Muy rico todo y el precio bien. El servicio muy amables

Sitio 100% recomendable , la comida es espectacular, hay platos que rozan la estrella Michelin. Y lo mejor de todo no es la comida ( que es espectacular) el trato de 10, super atentos y profesionales. ¡Gracias!

Hemos estado hoy uno de mayo de 2025 y una gozada de lugar. Todo excelente la comida el servicio trato agradable y personalizado. Hemos estado cuatro personas y nos ha encantado. Repetiremos fijo🥳🥳

Un placer en todos los sentidos. Desde el servicio, pasando por la calidad de los productos y la impecable elaboración. Nos sentimos muy a gusto. Trato excelente del personal y una cocina con mayúsculas. Texturas innovadoras, fusión de sabores nuevos y tradicionales en perfecta sintonía. 100% recomendable, en pareja, familia, negocios, etc. Volveremos a disfrutar de esta gran experiencia sin duda.

Fue una experiencia espectacular, local pequeño y sencillo a los pies de la catedral, tienen menú concertado,eliges el 2 °plato y el postre .E L camarero te da toda clase de explicaciones del menú y el producto, ingredientes y la carta de vinos .la comida estaba espectacular . El cocinero también salió a saludar. No dudes en acudir,