El Celler de Can Roca en Girona

El Celler de Can Roca es mucho más que un restaurante con 3 Estrellas Michelin: es una experiencia inolvidable de inicio a fin. Mi pareja pudo conseguir reserva por enchufe porque hay meses para la lista de espera. Desde la cálida bienvenida hasta el último detalle del servicio, todo está cuidado con una excelencia difícil de describir. El equipo transmite pasión y respeto por la gastronomía, y cada plato es una obra de arte que combina técnica, innovación y emoción. Los maridajes sorprenden y elevan cada bocado a otro nivel. El ambiente es elegante pero cercano, y logra que te sientas parte de algo especial. La dedicación de los hermanos Roca se percibe en cada gesto, en cada sabor y en cada explicación que acompaña la experiencia. No es solo comer, es vivir un viaje sensorial que te marca para siempre. Un lugar imprescindible para quienes aman la alta cocina y buscan la perfección hecha experiencia🩷🩷

Simplemente el mejor restaurante del mundo. Cualquier cosa que pudiese decir se quedaría corta. ⭐️ He visitado 5 restaurantes con estrellas Michelín los últimos 3 años y este restaurante es sin lugar a dudas, y de lejos, la mejor experiencia culinaria de mi vida. 🤯 Desde el primer momento, donde nos recibieron Jordi y Joan Roca, pasando por cada uno de los detalles de cada plato, cada momento, cada interacción con los camareros o sommeliers. Hasta que sales por la puerta, es simplemente increíble. 🔝 A nivel personal, los platos que más me gustaron fueron el tributo de berenjena, el langostino y la gamba de Palamós. Aún así, prácticamente ningún plato te deja indiferente (mucho decir en un menú de 18 platos). 🙌🏻 Los postres es como entrar en otra realidad, en el divertido y auténtico mundo de Jordi Roca. 🎡 El sommelier un 10, los camareros un 10, el espacio un 10 (aunque me sorprendió su ubicación). Sin duda alguna se nota que cada hermano es el mejor en lo suyo, y que han creado un restaurante donde bebida, comida y postres fluyen para crear una experiencia increíble. 👌🏻 Por acabar, el hecho de que estén los 3 en todo momento, tan cercanos, que te enseñen cocinas, que pidas un recuerdo y te lo traigan firmado, que hablen contigo y se hagan las fotos que quieras… habla del porqué de su éxito y porqué son sin duda el mejor restaurante del mundo. 💯

Este restaurante está a otro nivel

No sé qué más puedo decir de este lugar que no se haya dicho ya. Esta fue la última cena de nuestro viaje de verano por Europa este año. Tuvimos suerte de salir de la lista de espera. Alquilamos un coche solo para conducir una hora desde Barcelona y cenar aquí. Un 3* significa que vale la pena el viaje solo para cenar. Estoy de acuerdo, ya que valió la pena el viaje y el trayecto: el epítome del 3*. La comida, la hospitalidad y el servicio son indescriptibles. Son muchos platos, pero todos eran tan sabrosos y divertidos que no queríamos que terminara. Con todo este éxito, los hermanos Roca siguen siendo tan humildes; cada uno nos honró con su presencia esa noche. El maridaje de vinos es imprescindible, pero la próxima vez, me sumergiré en su extensa carta de miles de botellas. Prepárense para una cena de al menos 4 horas. Se merecen sus elogios y estoy deseando volver.

Una experiencia inolvidable, show cooking, producto bien cuidado y realmente rico, ¡totalmente recomendado!

El servicio fue excelente, a pesar de que tuvimos diferentes camareros durante toda la noche. El maridaje de vinos con medias copas fue único y maridaba a la perfección con los numerosos platos. El interior era acogedor y cálido. A pesar de la calidad del postre (que no estuvo a la altura del menú general de esa noche), fue una de las experiencias gastronómicas más completas y perfectas que he tenido hasta la fecha.

Para mi, una experiencia inolvidable. So que es cierto, que me parecio una experiencia donde todo el tiempo predominaban sabores muy parecidos, el pescado y la gamba. Me faltó una variedad mas amolia de platos de carne. Por el resto, en general, repetiria.

Cuando era pequeño, mis abuelos tenían un huerto y llevaban las hortalizas frescas a casa para limpiar. Ayudábamos a mi abuela a sacar las habas verdes de sus vainas y las poníamos en un cuenco a parte. Recuerdo claramente cómo me puso una en la mano y me dijo que la probara, sonriendo. Un intenso sabor vegetal me inundó la boca, demasiado fuerte para un paladar infantil. Un bocado del (extenso) menú degustación revivió ese momento. De alguna forma, consiguen recrear intensidades en los sabores que pensaba imposibles en un paladar adulto. Y no acabó ahí, desbloqueé múltiples recuerdos más, igual de concretos e intensos: fue como volver a probar comida de niño.

No hay suficientes superlativos para describir nuestra experiencia gastronómica. Realmente tuvimos una de las comidas en nuestra vida. El servicio fue impecable y disfrutamos mucho de nuestra experiencia y coincidimos en que el precio que pagamos estaba justificado.

Soyons clairs ; il ne doit pas y avoir beaucoup d'autres tables qui sont supérieures à celle-ci ! Tout est fabuleux d'un bout à l'autre ! Emmenés dans un balai brillamment orchestré, nous avons parcouru les 17 mises en bouche, les 17 services et les 19 vins proposés dans un tourbillon de sensations gustatives et d'émotions. J'en suis personnellement ressorti "KO" tellement ce fut grandiose ! Il est certain que je reviendrai ici.