Cerveceria Johanna en Alicante

Buen servicio en mesa, atentos sin necesidad de estar con la mano levantada. Variedad de comidas, almuerzos y desayunos. Mesas dentro del local limitadas, y buena terraza exterior techada y cerrada. No es barato pero la calidad y el servicio lo valen.

Los camareros son profesionales. La comida buena, pero he comido y cenado éste verano en capitales europeas y he pagado lo mismo que aquí sin tener ni calidad ni cantidad que se le parezca. Creo que es un problema común en este país por el estrangulamiento fiscal de los establecimientos.

Fuimos por recomendación y salimos con sensación de no recomendarlo. Entrecot de ternera de 300gr que se quedó crudo y su gran parte era nervio, 22€. La ensaladilla rusa para compartir, insignificante, en dos cucharadas se termina. Pero lo que más nos llamó la atención es que por cada cerveza eran 5€, lo que hizo que la cuenta subiera 30€ en 6 cervezas, teniendo una cuenta de 115€ para tres personas comiendo simplemente dos entrecots, una hamburguesa, una ensaladilla y unos huevos rotos.

Este restaurante es para mí casi mi segunda casa. Empecé yendo porque mi tío celebraba el cumpleaños y ya no podría contar las veces que he ido, incluso sola y hasta con mi perro, con quien siempre tienen más paciencia que yo. Los desayunos son espectaculares, así como las comidas y las cenas. Hacen delicioso algo tan simple como las patatas fritas y tienen las mejores bravas que he probado nunca. Eso sí, no pidáis nunca tortitas de camarón (no vaya a ser que se acaben). Gracias por todo.

La comida estupenda. El arroz de secreto con ajetes, espectacular. La tarta de chocolate casera, impresionante. Las almejas a la marinera, para chuparse los dedos. Todo muy bien servido por un chico muy amable. Buen precio y calidad!!

Todo perfecto, hemos pedido varios arroces y a cual mejor.

La paella de mariscos es divina!

Visitamos este restaurante y quedamos impresionados desde el principio. El servicio fue excelente: el personal fue atento, amable y siempre dispuesto a recomendar y explicar cada plato con una sonrisa. La comida estaba deliciosa, hecha con ingredientes frescos y preparada con cariño. Para rematar, nos ofrecieron un aguardiente casero, una verdadera sorpresa: suave, aromático y con un sabor auténtico que te deja con ganas de más. Un lugar que sin duda deberías visitar de nuevo y recomendar.

Hacía tiempo que no iba a esta histórica cervecería de playa San Juan, pero desde hace dos meses que fuí y me encontré con un local renovado pero con la misma relación calidad precio ya he vuelto tres veces, y no serán las últimas de este año. Tapas de siempre, con elaboraciones clásicas, tradicionales, pero con un precio muy ajustado y una calidad que para mi es más que válida. Empezamos con una ensaladilla rusa, generosa ración para un plato de solo 3’40€. A mi faltó algo de intensidad en el sabor en la mahonesa, pero a mi familia le gustó mucho, a mitad entre la ensaladilla machacada y la que se le nota bien los trozos. Repetiremos. Las bravas son un fijo. Patata muy muy finas muy bien fritas y nada aceitosas. La salsa rica, con un punto picante, pero no excesivo, más cercano a una salsa de tomate picante ligero que las tipo ketchup que muchas veces te encuentras. El morro frito era una cosa que me lo pedía para mi cuando lo veo en carta, pero la última vez en esta cervecería pedí media y casi no lo pruebo. Está muy muy rico. Además me gusta mucho que la mayoría de las raciones puedan pedirse media ración, y no acaban sacándote una tapa, es una media ración. Pasamos a las minicroquetas de carabineros. Es la segunda vez que las pedimos. Están ricas, pero me resultan con mucho sabor, demasiado, me cansan un poco, no resultan naturales, pero a la familia le sigue gustando, por lo que supongo que seguiremos pidiendo. El queso frito con mermelada de frambuesa bien, pero quizá lo más flojo. Se nota que es producto congelado, pero bueno, tiene sabor pero por donde pasa moja. No creo que lo volvamos a pedir. Por último uno de chopitos, ricos, pero muy lejos de otros que otros que he probado de la zona. Por menos de 40 euros, con una cerveza grande, un tinto de verano y un agua grande, para la cantidad de las raciones, precio y calidad medio que tiene, no está mal. Gastronómicamente no aporta mucho, pero salir a tomar algo por playa de San Juan sin gastarte mucho y con una calidad media, esta bien y yo al menos repetiré.

Excelente ...trato , comida , instalaciones . Nos atendió Yeray , muy profesional. Pedimos un menú de arroz de verdura y marisco fabuloso . Lo mejor de la playa de san juan. Volveré.