Casa Fofi en Cillorigo de Liébana

Estamos pasando tres días en una suite triple (El Regollino)y la experiencia no puede ser mejor. La habitación es amplísima y consta de 3 espacios: dormitorio principal con 2 camas enormes juntas, un baño con ducha y un recibidor con sofá-cama. Las vistas del entorno son, sencillamente, cautivadoras. La parcela tiene diversos espacios exteriores para disfrutar al aire libre. La proximidad al río Deva amplían el encanto pues se oye su murmullo desde el exterior. El desayuno es muy completo y te ofrecen cocinar huevos (fritos, revueltos o en tortilla francesa) en el momento. El salón comedor es súper elegante, con mimo y todo lujo de detalles. La chimenea encendida por la tarde es un auténtico rincón con encanto. La música de fondo y la iluminación directa e indirecta hacen que la estancia pida disfrutar de este espacio de lectura o relajación. Completamos el alojamiento con media pensión en el cercano restaurante Casa Fofi. Optamos por las cenas y nos ofrecieron menú con 3 primeros, tres segundos, bebida, pan y postre. Sin duda merece la pena esta opción para cerrar el día tranquilamente. La variedad, calidad y elaboración de cada plato estuvieron a la altura esperada. La atención por parte del personal del hotel ha sido cálida, correcta y muy esmerada. Su ubicación tan próxima a Potes lo convierten en una opción estratégica. Se puede dejar el coche en la carretera general (hay sitio suficiente) y luego bajar hasta el hotel, apenas 50 metros. Volveremos a disfrutar de este rincón en otras estaciones del año.

Un lugar precioso, muy acogedor y muy bien situado. Las habitaciones estaban impecables y con todas las comodidades. El personal muy amable, todo de 10. Volveremos sin duda.

Preciosa ubicación, tranquilo, de gestión familiar, desayuno delicioso. Por desgracia, la cena llegó demasiado tarde para nosotros, los alemanes (a partir de las 20:00). Pero almorzamos una vez y estuvo delicioso. Esperamos volver.

Magnífica estancia de una semana. Preciosa casa con excelentes vistas desde la habitación, servicio atentísimo y detalles muy cuidados, magnífico desayuno, gran restaurante muy cerca de la posada y amabilidad a raudales de todo el personal de ambas instalaciones (Raquel, Jose, ...). No tenemos duda de que volveremos y, además, pronto.

Excelente posada con hermosas vistas. Personal muy amable, habitaciones impecables y bonitas.

Trato muy familiar, comida casera bien elaborada y productos de calidad, el cocido estaba espectacular y el cachopin de escándalo, volveré una y mil veces más

Todo lo que se espera de unos días de vacaciones, tranquilidad, servicio, buen hacer. Volveremos sin duda ya que tuvimos suerte de encontrar un verdadero oasis.

Una cálida bienvenida, personal atento, limpieza impecable y un ambiente encantador. Desayuno variado y abundante.

Un sitio super limpio y encantador al igual que la atención que te dan. Un 10 tanto para la recepción como para el servicio. Las vistas son muy bonitas y el local está decorado al detalle, un encanto!

Una posada con encanto propio, todo muy limpio y con detalles muy cuidados. El personal muy amable y atento. La habitación preciosa, cómoda y amplia. Se agradece que tengas unos ventiladores por si te hacen falta porque vinimos unos días que hacia mucha calor para esta zona. El desayuno, sencillo pero suficiente. Sin duda, volveria