09/11/2024: Ubicado en una discreta calle del barrio de Sants, donde uno no esperaría encontrar una joya gastronómica, se esconde un pequeño local que combina la frescura y el carácter de la cocina peruana con la delicadeza de la japonesa. A simple vista, el restaurante pasa desapercibido; su decoración es básica, casi espartana, y la atmósfera, aunque limpia, carece de calidez. Sin embargo, para quienes buscan experiencias culinarias auténticas, la primera impresión se convierte rápidamente en un juicio
La carta y sus sabores: un acierto tras otro
La experiencia comienza con un plato de pollo karaage. La fritura es impecable: crujiente por fuera y jugosa por dentro, con un sabor que sorprende por su equilibrio.
El ceviche de corvina llega fresco, perfectamente marinado, con una acidez que despierta el paladar y resalta la calidad del pescado. Cada bocado es un recordatorio de la fusión magistral entre la tradición peruana y la técnica nipona.
Como toque original, la croqueta de calabaza y queso azul se presenta como una combinación audaz que funciona sorprendentemente bien. La suavidad de la calabaza y el sabor pronunciado del queso azul se entrelazan en una experiencia que, aunque no esperada, es muy satisfactoria.
Los postres son, sin embargo, una historia aparte. Para los amantes del té matcha, el menú ofrece una amplia selección que puede dividir opiniones. La tarta de queso con matcha resulta ser una decepción; la intensidad del matcha domina hasta el punto de opacar el resto de sabores, dejando una textura densa y pesada. En contraste, el pastel de matcha logra un balance más agradable: aunque potente en sabor, es jugoso y satisfactorio.
Este modesto restaurante en Sants no es un lugar para quienes buscan lujos o servicio rápido. Es, sin embargo, una parada obligada para los apasionados de la buena comida dispuestos a esperar por una experiencia auténtica y bien lograda. La comida, con sus detalles y matices, demuestra que la verdadera calidad puede encontrarse en los lugares más inesperados. Con precios medios, es un destino que, pese a sus carencias en ambiente y ritmo, recompensa al comensal con platos que hablan por sí solos.
03/11/2024: Esta tienda está dirigida por un japonés que solía dirigir tiendas en Kamakura y otras zonas.
La chuleta al curry hecha con cerdo ibérico espeso y la tempura de higos estaban deliciosos. La chuleta de cerdo frita es la mejor✨
Está elaborado con mimo, así que si te apetece la comida japonesa, ¡te lo recomendamos!
También se ofrece cocina peruana.