Cafetería La Capa en Madrid

Pasion por el.vino, muy importante. Por copas. Tomamos burbujas, txacoli con madera, garnacha huesca y manzanilla. Muy buena comida. Si es cierto que daríauna vuelta a la.ensaladilla rusa.

Iba con la espectativa muy alta pero no ha sido así, el servicio un poco deficiente, el vino bueno pero sin referencias a cada botella. La verdad es que con las críticas que había leído creía que iba a ser mejor la experiencia, pero no fue así. Les deseo lo mejor pero no creo que repita.

Ambiente muy distendido, a veces incluso demasiado familiar, la comida bien.

Que gran lugar! Muy auténtico, los chicos súper apasionados de lo que hacen, la comida muy rica y el lugar inmejorable.

Este restaurante es un 10. Es precioso, vinos espectaculares, cocina vasca con producto top riquísima. Un lugar con esencia y alma de los que ya quedan pocos.

Me ha encantado como estos chicos le han dado toda una nueva vida y concepto a un bar del barrio de toda la vida. Si bien es cierto que los precios son un poco altos para la zona, también es verdad que lo que ofrecen no lo vas a encontrar en muchos otros sitios de Carabanchel. La Capa forma parte de esta nueva línea de negocios de hostelería que está llenando el barrio y dándole aún más color, y lo están haciendo de maravilla. Como mujer criada entre Los Carmenes y Carabanchel, puedo decir que siento mucho orgullo de ver que el barrio acoge este nuevo estilo de negocio. Enhorabuena.

Este sitio es muy especial. Disfrutamos muchísimo en la barra viendo salir platos, a los chicos disfrutar.. La comida toda buenísima, los vinos un 10! Que guay ir a sitios donde se ve que les encanta lo que hacen. Volveremos en nada

Nos encantó! Es un ambiente muy de barrio, con platos para nada pretenciosos para lo buenos que son. Buena música. Comida rica. Buena onda en los camareros. Gente relajada. Precios más que razonables. Todo perfecto, lo único malo: no hay aire acondicionado, así que cuidado mientras todavía hace calor.

La comida no nos pareció nada del otro mundo, y el servicio tampoco fue muy ágil. Supongo que es parte del concepto del lugar, que por cierto está súper bien logrado y me encantó. Eso sí, la comida no es realmente el punto fuerte de La Capa. En general todo estuvo bien, salvo la ensaladilla, que nos pareció demasiado arriesgada. No vayan esperando una experiencia gastronómica top, sino más bien a disfrutar de un concepto tradicional con un toque diferente y muy aesthetic.

Un trato fenómeno y una cena de primera. Para repetir sin duda.