Ca Pepico en Meliana

Hacía tiempo que no iba pero no me ha defraudado para nada. A pesar de coincidir con el apagón de luz nacional hicieron lo imposible para que todo fuese bien. Los entrantes estaban buenos pero la paella valenciana estaba genial. Arroz en su punto y sabroso. No dejamos ningún grano!! En cuanto a la bebida Pepe nos aconsejo súper bien. Nos bebimos dos botellas de cava que no conocíamos y que estaban geniales. Además, nos ofreció un vino dulce y un palo cortado para finalizar que pusieron el punto y final a una comida deliciosa. Es recomendable visitar!!

Recomendable al 200% Pocas veces se alinean todos los elementos para crear una experiencia gastronómica tan memorable como la vivida en este restaurante. Desde el primer momento, el trato del dueño y del equipo de sala nos hizo sentir como en un auténtico restaurante con estrella Michelin. El dueño, apasionado del vino, no solo comparte su conocimiento, sino que lo convierte en una parte esencial del viaje culinario, recomendando maridajes que elevan cada plato. La propuesta gastronómica es simplemente espectacular. Las alcachofas, directamente de su propia huerta, son una declaración de intenciones: producto, mimo y autenticidad. Las croquetas caseras merecen mención aparte, cremosas por dentro, con una fritura impecable. Aunque personalmente no probé las anchoas, mis acompañantes las calificaron de sobresalientes, y no son fáciles de impresionar. El calamar, acompañado de una salsita deliciosa, y la carne, tierna, jugosa y en su punto perfecto, confirmaron que aquí se cocina con alma y técnica. Pero si hay un final perfecto para esta experiencia, ese es el flan de cazaya. Más allá de su sabor insuperable, esconde una historia que lo hace aún más especial. Sin duda, volveremos para seguir descubriendo sus arroces, que prometen estar a la altura de todo lo demás. Un lugar al que se vuelve… y se recomienda sin dudar.

Comida un sábado con amigos. En primer lugar te ponen pan con aceite, estaba buenísimo. Pedimos de entrantes una croqueta de jamón y alcachofas. Muy rica. También sepia con cebolla, estaba increíblemente deliciosa. De arroz pedimos el de pato, setas y alcachofas, estaba en su punto y muy rico y sabroso. En cuanto a los postres, pedimos dos para 4 personas: tarta de queso y de chocolate también estaban muy ricas. El servicio fue rápido y amable.

Restaurante con mucho encanto y está todo muy bueno, además de maridar con un buen vino, aconsejado por Pepe.

Lugar ideal para comer y beber MUY RICO. Atención excelente. Un lugar para recomendar y volver!!! Gracias Pepe, el flan de cazalla espectacular… bueno y la paella y el tomate … y las alcachofas !!!!

Nuestro lugar preferido para comer un buen producto local y los mejores arroces.

Fuimos a celebrar mi cumpleaños por unos amigos que son clientes y hemos salido muy satisfechos. Calidad y profesionalidad. Si tengo que hacer una critica constructiva es que no tenían el postre arnadí y el camarero no lo sabía pero volveremos y en la reserva lo diremos

Fuera de serie!!! No solo la comida. El lugar y la atención inmejorables

De los mejores restaurantes de Valencia, sus arroces son espectaculares y las croquetas de bacalao de llorar. Las alcachofas buenísimas…y así hasta el final. Mención a parte los vinos, recomendaciones maravillosas y acertadas y originales. Un 10

Ca Pepico es un restaurante familiar en una pequeña ciudad en la línea de ferrocarril de Valencia Norte. Cogimos un taxi por unos 17 euros y estuvimos allí en 20 minutos de nuestro hotel urbano del centro. Está justo cerca de la estación de tren con servicio frecuente desde la ciudad. Hemos comido platos de arroz en otros restaurantes aquí pero, manos abajo, este es nuestro favorito. La calidez y bienvenida del propietario, Pepe, y su personal, es excepcional. Ellos realmente nos abrazaron. El restaurante es precioso en diseño, todo - blanco con numerosos azulejos y fotos históricas adornando las paredes. Excelente carta de vinos. Pedimos el "arroz seco" con pato y dos tipos de hongos. Maravilloso! Antes de la paella comí las que pueden haber sido las mejores alcachofas de toda mi vida, magníficamente salteadas y saladas. Este fue el primer día que estuvieron en oferta ya que recién ahora están entrando en temporada. También tenía la mitad de las pequeñas almejas, tallerinas. Antes del almuerzo nos obsequiaron con una preciosa ensaladilla y, después, dulces y copas de Mistela, el dulce digestivo valenciano. Hay un menú bastante permanente y también un menú "fuera de carta" con especialidades que cambian diariamente dependiendo del mercado y la temporada. Tenga en cuenta que los platos de arroz se comen en el almuerzo en esta región, no para la cena y el horario del restaurante lo refleja. Toda la comida fue encantadora. Nos dimos cuenta de una pared - foto montada del difunto Pepico en su burro - carro de madera conducido; después del almuerzo nos detuvimos afuera a esperar nuestro taxi cuando un carro similar se pasó, dibujado por un caballo festoneado! Encantador ver esto tan cerca de la gran ciudad. Los precios son extremadamente justos para la calidad superior. Si usted está buscando un excelente arroz y comida regional, no se pierda la oportunidad de comer en CA PEPICO y por favor: Saluda al restaurantero más acogedor, Pepe, de este crítico de Nueva York.