Bàr-bar en Barcelona

Un restaurante acogedor y con una bonita decoración. La comida es espectacular: las croquetas brutales y las vieiras están a otro nivel. El chico que nos atendió fue muy atento, nos dio recomendaciones acertadas y hizo que la experiencia fuera aún mejor. Sin duda, repetiremos. ¡Muy recomendable! ¿Te gustaría ajustar algo más?

Una de las cosas más complicadas a día de hoy, considero que es que un restaurante consiga sorprenderte y sin ningún tipo de dudas, en extra bar he flipado El personal es majísimo y sus recomendaciones excelentes.

Lugar pequeñito pero con mucho encanto. Buenos vinos y platitos con materia prima de primera para chuparse los dedos.

Mmmmmmm! de .. Maravilloso! Localito pequeñito en el mismo Torrent de l'Olla con la Travessera de Gràcia.. Barrita pequeñita Más mesa alta compartida por los que vienen acompañados Más algunos rincones de contra barra muy apreciados en la hora punta 🤩 Propuesta de platillos Calidad y tratamiento del producto de forma excelente Buen surtido de vinos y espumosos a copas para maridarlo todo bien ✨ Hable con Marc y le aconsejará con buen criterio y mucho oficio de lo que no se paga con dinero 🙏✨♥️

Hemos estado en Extra Bar dos veces y cada vez fue una experiencia increíble. El menú siempre cambia mientras mantienen algunos de los platos "clásicos" del menú. La calidad de la comida y el servicio es excelente, sería bueno tener un extractor porque después del lugar siempre olemos mucho aceite/comida ahaha lo único que se puede mejorar. Las croquetas son imprescindibles, la ensalada rusa con gambas también.

Espectacular toda la comida y el ambiente, volveremos cuando estemos en Barcelona

¡Experiencia para hacer! Muy recomendables las croquetas rellenas de carne y el tinto de verano.

Un pequeño bar con comida y vinos de alta qualidad. Todo bien trabajado. Platos tradicionales muy bien hechos, con productos excelentes. Recomiendo ++.

Mi novio y yo cenamos en este bar porque nos lo recomendó un amigo italiano que vive en Barcelona. El bar está situado en el bonito barrio de Gracia, tiene un pequeño cartel fuera y es muy pequeño por dentro, solo tiene una mesa central y la llamada "barra" delante de la cocina con unos taburetes donde se puede comer. Lo más probable es que no sea un lugar donde pararías a comer. Pero eso sí, ¡es algo absolutamente magnífico! Tomamos la típica ensaladilla rusa catalana con gambas, un tartar con mango, unas croquetas que quedaron muy crujientes por fuera, nada menos que extraordinarias y la textorra, una salchicha catalana. Muy buen vino blanco. Bueno que puedo decir, los italianos (y no italianos) que vayan a Barcelona, ​​tengan en cuenta este lugar que no es nada turístico y os dejará realmente satisfechos. 10 y alabanza.

Servicio súper amable, puedes probar el vino, excelente experiencia gastronómica y ambiente muy acogedor.