Bar Abel en Santander

Comida excelente en un restaurante local. Hay mucha gente, así que reserve. El atún con cebolla y pimientos estaba delicioso. Tienen menú en inglés.

Excelente comida, elijas la que elijas. Cocina genial. Escondido, pero totalmente recomendable.

Espectacular lo que hemos comido

Comida excelente a precios económicos, restaurante de barrio con muy buena relación calidad precio, nos ha encantado.

Buen servicio las camareras super amables llegamos justos de tiempo para comer y nos atendieron,la comida buena ,lo recomiendo

Un sitio perfecto para comer bien sin gastar demasiado. La comida está rica, casera y con buen sabor, y los precios son muy ajustados para la calidad que ofrecen. Las raciones tienen un tamaño correcto y se nota que cocinan con cariño. Ideal para quienes buscan un lugar donde disfrutar de una buena comida a buen precio, sin complicaciones y con un ambiente agradable. Muy recomendable.

Lugar auténtico. Comimos pulpo, albóndigas de merluza y gamba 🔝 y gambas al ajillo. Todo buenísimo!!!

Muy bien. Llegamos sin reserva, y nos ofrecieron un sitio en la barra. Como pretendíamos comer guisos tradicionales (entre otras cosas), decidimos no quedarnos si no podíamos ocupar una mesa, y dado que pasaban las tres, les propusimos esperar a que se quedara alguna mesa libre, a lo que accedieron sin problema. A los pocos minutos ya estábamos sentados, y aunque la comida ha ido llegando a un ritmo así irregular, nos ha gustado todo lo que hemos probado, con raciones razonables tirando a generosas, y precio también razonable. Raciones (10-12 € c/u) de croquetas de queso, bocartes y rabas más unas alubias arroceras (ojo, no llevan arroz) con pulpo, gambas y almejas (este guiso estaba espectacular, 14 € y eran casi dos buenos platos). 2 botellas de agua grandes y una con gas, más 4 porciones de pan, 57 €. Trato amable y atento por parte de las camareras, local animado (algo ruidoso, pero dentro de lo habitual en un bar-restaurante de estas características).

Estaba lleno pero nos dejaron comer en la barra. Comida casera, bar de toda la vida, clientes frecuentes que repiten. Muy buen trato, buen ambiente, muy buena relación calidad precio.

Esperaba más, reservé por las buenas críticas. Está en un barrio, que no sé si merece la pena ir aposta, estando alojado en zona turística. Buenas las rabas, pero sosos, escasos y pequeños los chipirones y las patatas ali olí congeladas. Precios buenos.