Baden Baden en Bilbao

Un lugar mítico e histórico de Bilbao. Confiando y primando en la materia prima, cuidan el producto mucho. De hecho, todo está buenísimo. Esto también se nota en el precio, que no es barato, pero que si analizamos la relación calidad-precio, además de la ubicación, es inmejorable.

Comida y servicio genial!! Super atentos.... incluso cuando se nos acabó la botella de vino nos ofrecieron para terminar de comer una copa del mismo vino....un detalle. El ambiente lo puntuo bajó porque no esperaba ambiente de celebración de cumpleaños y resultó un poco ruidoso, pero comprensible. Buenos profesionales .

Lugar perfecto para un menú rápido y de calidad. Servicio ágil y ajustado. Relación calidad/precio interesante.

El trato de los camareros es muy agradable y la disposición muy buena. En cuanto a la comida entiendo que es de buena calidad a precio razonable

Amable con sabrosos pinchos y buena selección de bebidas.

Buen local, comida muy buena y trato espectacular

En pleno centro de Bilbao, es una cafetería con mucho trajín. Ofrece desayunos , comidas y cenas con amplio horario. Servicio eficaz. Buena calidad y precios ajustados a la zona. Aconsejable , sobre todo para viajeros.

Había estado en la ópera. Wagner. Está cerca del teatro de ópera. No hay muchos lugares abiertos. Este lugar era. Filete con papas fritas y una bebida, justo después de medianoche. Al lado de mi hotel

Un magnífico local para ir de pintxos en Bilbao. Nos tomamos dos rondas de cervezas allí y la verdad que acabamos bastante contentos. En primer lugar, me gustaría destacar para bien el elegante estilo que presenta su salón. Con respecto al servicio, el señor de la barra fue muy majo en todo momento, e incluso nos hizo recomendaciones de pintxos a tomar. De dichos pintxos, he de decir que todos tenían muy buena pinta, pero sin duda alguna el de bacalao al pil pil, se lleva la palma. Me encantó pues estaba súper tierno y sabroso, y lo recomiendo al 100%. En definitiva, una opción más que segura si quieres comer por los alrededores de San Mamés.

Oh cómo quería amar este lugar. Lo encontré en una web de GF options en Bilbao y lo guardé para mi almuerzo de cumpleaños. Decepcionante. No es un gran rollo con las televisiones (inusual para España) pero había un partido de fútbol encendido, así que pensé que era por eso. El juego terminó y los televisores se quedaron encendidos. Me di cuenta de que NO había clientes vigilándolos, así que ¿por qué llevarlos puestos? Nuestro camarero parecía bastante gruñón. Pedimos el entrante de espárragos y tenía más mayonesa rociada que yo en un año. De todas formas, no soy grande en mayo, pero mi esposo fan también comentó sobre la falta de creatividad en la “salsa”. Mi sartén - calamar abrasado era genial, así como la chuleta de carne de mi marido. Entonces el camarero gruñón nos trajo nuestro cheque. ¿Disculpe? Nunca me han dado un cheque en España sin pedirlo. La tradición de “sobre mesa” es muy importante. Había un par de hombres mayores jugando a las cartas con una botella de vino y no los vi ser expulsados. MÁS la comida a precio fijo incluye postre. Señalé al camarero que no habíamos comido postre y recitó a regañadientes una lista parcial. Veneré a otros del menú y les pregunté (en español fluido) si el melón era la única fruta ya que el menú decía “peras en salsa de vino”. Dijo que sí. Así que pedí la tarta de queso que había sido una de las ofrendas. Sacó una triste cuña de melón. No me molesté en decir nada porque estaba claro que había terminado con nosotros. No nos ofrecieron el cheque de nuevo y tuvimos que ir al bar a pagar. No volvería ni lo recomendaría debido al servicio. Entiendo que la gente puede tener un mal día, pero los calamares y los cuchilleros mientras eran buenos no eran lo suficientemente buenos como para arriesgarse a sentirse tan desagradables.