Aravell Restaurant en Montferrer i Castellbò

Este restaurante forma parte del club de golf Aravell. Y, por supuesto, se puede ir sin jugar al golf, y nosotros lo hicimos muchas veces. La comida es normalita para España y rara vez ha sido extraordinaria, pero cuando tienes la oportunidad de sentarte al aire libre, en la terraza, con vistas al campo de golf, disfrutando de las suaves laderas, el sol calentándote la piel y los Pirineos al fondo, ¡ES IMPRESIONANTE! Y, por supuesto, al ser el restaurante del club de golf, los clientes que van son relajados. Vienen a jugar al golf. Así que el ambiente es el de un club de golf. Nada de esnobs, simplemente agradables y relajados. ¿Recomiendo ir en coche desde La Seu d'Urgell? Sí. Otros restaurantes en La Seu son igual de normales, pero ninguno tiene esa preciosa terraza exterior que se puede disfrutar desde la primavera hasta el otoño.

Restaurante sin pretensiones, buena acogida carta algo corta pero suficiente, el plato de pescado del día muy escaso pero bueno, raciones normales, croquetas recomendables , patatas bravas buenas , devolvimos el vino y nos lo cambiaron sin problema pero teniendo una carta tan pequeña no puede ser que no puedan tener algunos platos ( arroz de montaña y crema maíz ) En ese aspecto tienen que mejorar Servicio amable y atento Volveré me quedé con ganas de probar el arroz

Es agradable ver un club de golf con una oferta gastronómica un poco más amplia que los sándwiches y hamburguesas habituales.

Correcto para tomar algo en el campo de golf. Buen servicio.

Hemos estado comiendo con un grupo de ocho, todos adultos, en víspera de festivo. Leyendo las reseñas anteriores debemos suponer que nos tocó el día malo para ir. Es cierto que la ubicación es muy buena, tienen aparcamiento propio y el personal de servicio fue correcto. Pero, como he dicho en alguna ocasión, a un restaurante se va fundamentalmente a comer, y ahí hubo varias pegas. Podemos estar de acuerdo en que en un lunes por ser víspera de festivo no haya menú y que la opción sea carta, pero entonces a los platos se les supone una calidad acorde con el precio, pero no. Platos poco resueltos: ensaladas discretas, tártaro de salmón con dados demasiado grandes, fricandó con poco sabor, pollo demasiado hecho, melón de poca calidad y helados medio desecho. Como si todo estuviera hecho con escaso entusiasmo. La relación calidad-precio en esta ocasión no ha sido adecuada. El problema es que era la primera vez que íbamos, dado que los restaurantes de la zona que conocemos estaban cerrados, y me temo no volveremos, perdiéndose la posibilidad de contrastar con una nueva visita.

Buen descubrimiento y muy buenos platos. Vale la pena ir tanto por la comida como por las vistas sobre el Cadí. Tienen un menú entre semana además de la carta. El servicio amable pero algo lentos.

Hemos comido menú en sábado para comer, por 20€ 1er, 2º y postre, bebida y cafés aparte, la comida muy buena a pesar del punto, sin duda volveremos y la próxima con amigos o familia, muy recomendable. Unas vistas del Cadí nevado espectaculares