Zezeo Neotaberna en Utrera

El cookie sundae puede ser el mejor postre que he probado en mi vida. Muy recomendable el pan bao de langostinos

Texto corregido y resumido: Elegimos el sitio por cercanía, aunque al principio tenía mis dudas porque no lo conocía bien. Sin embargo, desde que entramos, el recibimiento fue tan cálido que enseguida notamos el agrado y la disposición para hacernos sentir a gusto. Nos atendieron dos chicas, una de ellas llamada Rosa. Su trato fue excepcional: profesional, cercana y con un gran conocimiento, especialmente al recomendarnos un vino que resultó excelente. También nos sugirió varios platos y un postre de torrijas con helado que estaba espectacular. Su compañera, una chica colombiana muy amable (no recordamos su nombre), nos recomendó el pan bao con langostinos y el mantecadito, ambos deliciosos. Solo nos queda agradecer la atención recibida. Da gusto encontrar personas que, además de hacer bien su trabajo, le ponen cariño y pasión. Eso no se paga con el sueldo, y se nota cuando alguien lo hace porque realmente le gusta. Gracias, Rosa y compañera, por ser el rostro amable detrás de esos platos tan ricos. ¡Amenazamos con volver!

Buena atención. Carta variada. Quizás mucho jaleo al estar muy lleno

Ha sido un gran descubrimiento. Almorzamos en familia y quisimos probar los máximos platos posibles. Desde los entrantes hasta los postres todo está exquisito y muy bien elaborado. La atención de las camareras es excepcional y te aconsejan muy bien. Con un diseño moderno me encantó la referencia a las tabernas antiguas con su cartel "Prohibido el cante".

Muy buena relación calidad precio. Merece la pena probar todo lo que puedas , muchos platos te sorprenderán.

Buenísima calidad/precio y riquísimas todas sus tapas y platos. Tanto en carta como sugerencias del día. Recomiendo reservar con antelación. De mis favoritos en Utrera. Los desayunos son extraordinarios. Y la atención del personal maravilloso, cercano y cariñoso. Un 10 en todo.

Local bien decorado, creando un ambiente muy agradable y que cuenta también con terraza. Carta amplia, con tapas y raciones, desde las más castizas hasta las modernas, montaditos, así como 4 opciones de carne. Solo las patatas bravas merecen la visita. Deseando volver para seguir probando el resto de la carta.

Llegamos cerca de las 4 de la tarde buscando un sitio para comer, entendiendo de antemano que iba a ser prácticamente imposible, sobre todo porque estaban ya llenos. Pues en menos de 10 minutos nos prepararon una mesa, nos atendieron estupendamente, y la comida está espectacular. Carmen además simpatiquísima. Nos gustó tanto que desde Córdoba volveremos expresamente a esta casa porque merece la pena.

Espectacular la comida, el trato y el servicio. Carmen nos atendió super bien.Gran profesional, nos aconsejo en todo con gran amabilidad y simpatía. Seguro que volveremos ya que el trato ha sido más que satisfactorio .

Inmejorable el Servicio y la Calidad. Todo de 100% y sobre la amabilidad del Servicio. Sugerencia poner debajo de las mesas altas algo para colgar los bolsos. Gracias