Waman Restaurante en Bilbao

Restaurante peruano situado en Deusto con un menú degustación espectacular. Ambiente cuidado, servicio excelente, platos elaborados muy ricos. Muy recomendable.

Experiencia inolvidable. Un viaje para los sentidos. Desde el momento en que cruzas la puerta, el servicio es impecable, atento y cálido, haciendo que cada comensal se sienta especial. La opción de menú degustación es una obra maestra, con platos que sorprenden tanto en sabor como en presentación. Cada bocado es un reflejo de la riqueza y diversidad de la gastronomía peruana, llevada a un nivel de sofisticación que honra sus raíces y explora nuevas fronteras. El maridaje eleva aún más la experiencia, con un sommelier apasionado que guía cada elección. Su conocimiento y habilidad para romper con los cánones tradicionales brindan un acompañamiento audaz y sorprendente, siempre acertado y en perfecta armonía con los platos. Un lugar que invita a volver y a seguir descubriendo.

Una Maravilla. Mario y Guillermo nos han hecho sentir como en casa, sin desmerecer al resto del equipo que ham sido amabilísimos. Un menú maravilloso y la carta de vinos a la altura. No os vayáis sin probar el pisco de maracuyá.

Una reunión muy agradable en el restaurante, comida deliciosa y servicio agradable. Muy lindo diseño de restaurante, cómodo! Todas las porciones pedidas para dos se dividieron inmediatamente, por lo que todas las fotos son mitades.

Lugar verdaderamente hermoso, comida espectacular, un viaje culinario. Felicitaciones

Me encantó este restaurante, la comida es exquisita, cada plato probado fue perfecto y además me sentí muy bien atendida. Lo recomiendo 100%!!! Yulieth la camarera fue muy amable, muy buena la experiencia, vamos a volver.

Estuvimos comiendo un menu degustacion. La comida estuvo bien y se nota que hay mucho trabajo detras. Lo que no me parecio de agrado fue que llegase 8 minutos tarde(en teoria teniamos a las 15:00 pero nos preguntaron si podriamos a las 14:45 y a mi no me dio tiempo, mis amigas estaban ya sentadas). Pedi por favor si me podrian traer la copita de vino que tenian ellas, alegue que habia llegado algo tarde y que por eso no la tenia. Senti que el camarero me miro con cara extraña, me lleno agua y se fue. Pasaron 15min y vi que empezaban a sacar los platos y no me habian traido la copa por lo que le pregunte a una camarera y me dijo que iba a preguntar. No supe nada mas del tema... Si la copa no me la dan porque llegue tarde, vale. Puedo estae de acuerdo o no pero me das la explicacion y listo pero que me ignoren como hicieron, lo siento pero no. Y no creo que se les olvidase porque se lo recorde dos veces disitintas. Me senti ignorada.

Bonita experiencia gastronomica, muy buena atención y magnificos vinos.

Ojalá pudiera dar 4⭐️ pero fue más como un 3,5⭐️ Los entrantes estaban deliciosos, el ceviche estaba fenomenal, el centolla y el plato de vieiras/cerdo estaban sólidos. El simulacro de risotto (orzo) era una pesadilla de textura con sabores desequilibrados y el "raviolo" era visualmente agradable, muy inteligente en contexto, pero eso es todo. La espuma de mango y piña (se me olvidó tomar una foto) estaba buenísima, pero el plato hace más daño que bien a los ingredientes. Por último, la trilogía del pistacho necesita urgentemente un poco de crujido; teníamos muchas más esperanzas en este plato. Tenían una gran selección de vinos, uno de los cuales su experto sumiller ayudó a elegir. Desafortunadamente, él fue lo más destacado del servicio, ya que nuestra camarera no estaba muy entusiasmada (y no hablaba inglés, lo cual no me importó, pero podría ser un problema para algunos). Tenga en cuenta que los fines de semana solo hay menú de degustación y no estoy seguro de si está indicado en algún lugar de su sitio web. En general, la comida tiene una buena relación calidad-precio, pero todavía está bastante sin pulir.

El menu degustación nos ha encantado. Todos los platos riquísimos, sabores que sorprenden y te dejan con ganas de repetir. Espacio muy agradable.