Vilallonga Masia Restaurant en Sant Cugat del Vallès

Entorno agradable y buena comida

Masía ubicada en un entorno agradable de naturaleza. Magnífica terraza exterior, tranquila y relajante. Relación calidad-precio elevada por mi gusto si tenemos en cuenta lo que ofrecen y cómo lo ofrecen. Pedimos como entrantes unas croquetas de jamón y bacalao (pequeñas, pero correctas) y unas patatas bravas (demasiado blandas para mi gusto) y como segundos un bacalao a la muselina de ajos y un atún a la brasa. Del bacalao diré que la presentación era correcta, el tamaño de la prenda era justito y en cuanto a la elaboración varias cosas: llegó poco caliente, muselina con muy poco gusto, y el tomate que lleva de base el plato estaba completamente frío de nevera. Un bacalao a 25,50€, debe ser, primer generoso de tamaño y sobre todo bien cocinado. En cuanto al atún, elaboración correcta, pero por 24,00 € la cantidad es muy justa. Dos rebanadas pequeñas de pan de payés, 3,00€. Postres elevados de precio, todos a partir de 7,00 €. Servicio correcto. Espacio entre mesas amplio. Lavabos limpios. Resumiendo: como positivo el entorno, la masía en general, el servicio... Como mejorable: la relación calidad-precio y la elaboración del bacalao que es lo que probé. Si mejoran en estos aspectos, se podrían convertir en uno de los mejores restaurantes-masía de Collserola.

Excelente como siempre, un entorno immejorable con comida y servicio completamente al nivel. Muy recomendable

Siempre es un acierto comer en el restaurante Vilallonga. Esta gente la "toca", la "toca" en la cocina, en la sala, en el servicio, en los espacios, en la getión, en la organización, ... No hay sorpresas, y aunque los imprevistos, no son previsibles, si ocurren, la reacción de todo el equipo es rápida y eficiente. Gracias, Carlos y Lina, por estas maravillosas experiencias que no hacéis disfrutar en vuestro restaurante. Hacer extensivas nuestras felicitaciones también, a vuestro equipo de camareros y cocineros, ya que con su trabajo podéis ofrecer servicios existosos en cada comida. No dejéis nunca de tratarnos como parte de la familia... es lo que hace que disfrutemos tanto de cada visita. Siempre acabo mis reseñas con dos recomendaciones; la primera que, para disfrutar de una buena comida, es necesario ir a disfrutar de la comida, lo que supone que os toméis el tiempo para hacerlo, y la segunda que intentéis reservar con tiempo. Iréis más tranquilos a comer y ayudamos a los restaurantes a organizar mejor sus mesas. Buen provecho !!!!

Increíble calidad a los detalles. Atención de 10! Todo muy bueno! El cheesecake… brutal! Y todo en una atmósfera muy tranquila. Definitivamente volveremos!

Bonito restaurante 😋, buena comida,buen servicio y mejor ambiente!!

Comida extraordinaria! Todo súper bueno y rápido, todos los platos estaban súper fresco y bien cocinado.

Acudimos con un bebe y nos atendieron desde el primer momento con excelencia, cosa que se puede decir de pocos sitios. Comedor con encanto. Servicio muy bueno y rápido. Comida calidad, cantidad, precio muy buena. El precio del servicio del pan es lo único que lo vimos excesivo. Seguro que repetiremos.

Hace unos años que disfrutamos de las excelencias de este magnífico restaurante, asentado en las faldas del Tibidabo, en la sierra de Collserola, en Sant Cugat del Vallés. El entorno es idílico y el restaurante ocupa el espacio de una Masia, que data del siglo XIV, con un interiorismo en madera que da a todas sus estancias un ambiente cálido y confortable. Siempre me gusta observar cómo funcionan los restaurantes, y cuando se sincronizan sala y cocina, se produce una magia especial. Carlos, Tina y todo su equipo funcionan con una coordinación envidiable, no sin mucho trabajo, esfuerzo y nervios en todos los servicios, pero esos son los secretos de una buena restauración, bueno, esos y una magnifica cocina, con una no demasiado extensa carta, pero con una excelencia en su elaboración, presentación y puesta en mesa. Os podría mencionar toda su carta, basada en la gastronomía tradicional catalana, como decimos en catalán, "casolana", hecha en casa o casera, pero os invitaré a que la descubrías en unas cuantas visitas. De todos modos, os dejo un avance con dos de sus platos: el morro de bacalao a la muselina de ajo y el meloso de ternera. Todo y ser platos muy distintos, no sabría indicaros cuál es mi favorito... platos sabrosos, ricos de verdad y tremendamente gustosos. Diría que todo lo que puede hacer su cocina, se transmite perfectamente en toda su carta, pero especialmente en estos dos platos. Por cierto, y a banda de estos magníficos platos, si tenéis ocasión probar su espectacular "romesco", que acompaña sus patatas, bravas, sus alcachofas a la brasa, ... Su oferta de vinos permite satisfacer los gustos de casi todos los comensales, con vinos locales, de proximidad, Penedés, Terra Alta, Montsat o Priorat entre otros, pero sin descuidar otras magnificas bodegas como Rioja, Ribera de Duero o Jerez. Siempre acabo mis reseñas con dos recomendaciones; la primera que, para disfrutar de una buena comida, es necesario ir a disfrutar de la comida, lo que supone que os toméis el tiempo para hacerlo, y la segunda que intentéis reservar con tiempo. Iréis más tranquilos a comer y ayudamos a los restaurantes a organizar mejor sus mesas. Buen provecho !!!!

Raciones abundantes y carne exquisita. Excelente equilibrio calidad precio. Atención del personal muy profesional. El local en sí está muy bien, limpio y con las mesas distribuidas sin agobios.