Trattoria Pinocchio en Madrid

Pizzería de ambiente familiar muy bien atendida, pasta muy abundante y pizzas correctas. Siempre repetimos, sobre todo por la excelente atención de todo el personal.

Se deben mejorar cosas, limpieza de mesas escasa, comida calidad media. Yo no volvería .

Trato inmejorable, como siempre. Nos sentimos como en casa, nos tratan fenomenal. La comida está deliciosa y te atienden muy rápido. Es un sitio estupendo 😃

¡Excelente! Buen precio y comida riquísima, ¡la mejor de la región!

Muy rico y económico, y muy amable la atención.

No soy un experto en pastas, pizzas y lugares de comida italianos.. seguramente no sepa distinguir entre la pasta fresca, recien elaborada, o la que te venden industrial.. nin falta que fay.. Una ensalada César que gustó mucho a la comensal que la pidió. un pizza Carbonara para otro de los comensales, la pizza vegetal para mi esposa y un plato de Linguini o tallarines y frutos del mar.. Qué más puedo decir: Madrid a las 9 de la noche, ayer, encontramos esta "trattoría" con aspecto de restaurante familiar italiano, y una sala corrida de pasillo largo con asientos adosados a la pared, sillas sencillas pero cómodas, y una atención amable y solícita por parte de personal con cierta edad que me sorprendió gratamente: Clientes en su mayoría grupos y matrimonios de edad madura, y junto al escaparate una familia con 3 infantes... No teníamos mucha hambre, ni pedimos entrantes y nos conformamos con el plato principal que cada un@ eligió (ya los he descrito al principio.. una cerveza grande y fría, suave, unas patatas chips de aperitivo, y cuatro bollitos , de los que ninguno de mis acompañantes quiso comer salvo yo, que, viendo mi plato sencillo de pasta envuelto en salsa de tomate, me armé de un buen trozo de pan y, tenedor en ristre, empecé a comer: Es la primera vez que como unos tallarines envueltos en tomate suave, con la pasta como a mí me gusta (nada de "al dente"), solo un poco más blanda pero con la tersura suficiente para que mi paladar lo agradezca y evoque la pasta que servidor se hace en su propia casa.. mejillones y trocitos de calamar, y un sabor suave, sencillo, sin acidez apenas, y color muy parecido al del tomate natural que servidor elabora, también, en casa.. ¿Hace falta algo más? De verdad? Comerse un buen plato como el que acabo de describir, con un trozo de pan, rebañar los restos de salsa con el resto del pan, y dejar el plato limpio, sin muchas ganas de comer, creo que deberían ser suficiente ejemplo de que la comida ESTABA BUENA (por decir algo).. La pizza vegetal, a pesar de que no era grande, convenció a mi mujer (precisamente por el tamaño y su falta de apetito) para pedirla... para ser "pequeña", como he leído en algunas reseñas, a mí me pareció el tamaño justo para un/una comensal..y acabé comiendo dos porciones a pesar de que aborrezco cualquier tipo de queso.. Por mi parte, decir que, en cuanto vuelva a Madrid, ya tengo referente de restaurante italiano para volver..

La comida estaba muy buena. La relación calidad-precio era excelente. Todo estaba muy limpio.

No pidas ni Prosecco (te servirán cava) ni Aperol Spritz (no le añaden ningún tipo de Prosecco ni cava, solo Aperol con soda).

Comida excelente, con mucha variedad. Amplio espacio, ideal para grupos grandes. Ambiente agradable, buena ubicación, cerca del museo.

Muy buena la comida, los precios y la atención