The One en Benidorm

Puedes llegar a ver normal este tipo de restaurantes, pero no lo son. Aquí puede que sí. En muchos de ellos venden comida muy dispar, pero el miedo nos impide pedir otro tipo de comida que no sea rápida o algo sencillo. Así que elegimos pollo, patata asada con guarnición y pizza. No estuvo mal del todo, el solecito y descanso vacacional empuja el optimismo con fuerza. No es para repetir ni por asomo. Pero cuando lo que importa es el lugar y el momento, pues tampoco pasa nada. Te "alimentas" y no piensas en nada culinario que se haga disfrutar.

Experiencia exelente se lo recomiendo a todo el mundo muy buenos helados y muy buena comida