Tamaya en Bilbao

Nos ha gustado mucho la comida, el sitio y la atención que nos han brindado en este restaurante

Muy buen servicio y platos muy ricos y bien elaborados.

Impecable. ¡El jefe es hospitalario! Después de muchos años en un viaje de negocios, todavía sabe igual.

Es una comida china muy auténtica en Bilbao. Algunas de las guarniciones menos populares son aún más sorprendentes. Recomiendo a los turistas chinos que vengan aquí para satisfacer sus antojos.

Recomiendo mucho este restaurante. Muy buena la comida, el servicio y el precio.

Muy buena comida china. La comida frita era crujiente y no grasienta. Los fideos estaban muy bien cocinados - conservando un buen bocado. La sopa caliente y agria estaba buena - ten en cuenta que no es una sola porción como en el Reino Unido. Viene en un tazón grande que podría alimentar a 4 personas. Las porciones son generalmente muy grandes. El servicio fue rápido con la comida llegando mientras todavía muy caliente. El personal era cortés y muy servicial. Si estás buscando una comida china en Bilbao, no dudaría en recomendar este restaurante.

Todo de 10 muy recomendable estaba muy rico y un servicio excelente

Buen menú fin de semana por 20€, muy rico. Camareros amabilísimos, excepto la encargada, con prisas y no tan buena atención como ellos

Probamos este restaurante de forma bastante aleatoria porque muy amablemente accedieron a servirnos pollo empanizado y patatas fritas a nuestro hijo que es muy exigente a la hora de cocinar. Este plato normalmente no está en el menú. Hicimos muy bien en entrar allí. Fuimos muy bien recibidos y muy bien ubicados, justo debajo del cerezo artificial. El personal es muy amable y disponible. Se tomaron el tiempo para comprender nuestras solicitudes e hicieron todo lo posible para responder lo mejor que pudieron. ¡No es muy fácil pedir comida asiática en España si no hablas español! Afortunadamente, el menú muestra todos los platos en fotos, ¡lo que facilita mucho la elección! Pedimos dos menús por 20€50 más rollitos de primavera y tapones de vapor. De los menús, teníamos una ensalada de gambas en tempura, un trío de sushi con jengibre y wasabi, pato pekin (pato frito con verduras y tortitas de arroz), arroz negro frito con salsa de pollo y verduras y de postre, crema de yogur con frutos rojos, miel y speculoos. Si el servicio es un poco lento (excepto el sushi), la comida es excelente. Los productos son frescos, los platos copiosos, muy bien condimentados y sabrosos. Recomiendo su arroz negro, servido muy caliente en una cazuela pequeña. Es muy fragante. Los rollitos de primavera son auténticamente caseros, sus formas lo atestiguan y su sabor es más fino que el de los rollitos de primavera industriales. Al final de la comida, el camarero se ofreció a tomarnos una selfie con mi hijo y conmigo. Pequeño interludio inesperado y divertido. Al final la factura resultó ser muy razonable. Sin duda, más caro que la media en Francia, pero para una cocina de calidad. Si quieres comer comida asiática antes (o después) de una visita al Museo Guggenheim, te recomiendo este agradable lugar con una cocina fina y original.

Buena comida, gran servicio y precios justos. ¡Los fideos de arroz fritos con camarones estaban deliciosos!