TABERNA MAYO en Segovia

Buen sitio para ir salvo q tengas alguna alergia alimentaria . Fuimos con un alergico al huevo y queria pedir unos calamares a la andaluza y aunq el propio plato no lleva huevo los frien en aceite donde hacen otros platos q si llevan huevo por lo q no lo pudo comer y no te ofrecen la posibilidad de hacerlo en una sarten con aceite limpio .

Muy bien también para tomar un café por la mañana y desayunar. Muy buena pinta todo.

Los entrantes estaban muy bien pero los entrecots estaban cocidos... no estaban muy bien echos, eso si el personal muy correcto y muy amables

El Bar Restaurante Bahía es uno de esos lugares de barrio que te hacen sentir como en casa desde el primer día. Acudo casi a diario porque siempre me reciben con una sonrisa y una atención de diez. El ambiente es acogedor, familiar y muy limpio, ideal tanto para tomar un café tranquilo como para disfrutar de unas buenas raciones con amigos. Los torreznos son espectaculares, crujientes por fuera y tiernos por dentro —de los mejores de Segovia—, y la tortilla está sencillamente buenísima: jugosa, sabrosa y siempre en su punto. Además, ofrecen menús del día variados, abundantes y bien elaborados, con una excelente relación calidad-precio. Las raciones también son generosas y perfectas para compartir. En definitiva, el Bahía es un bar de toda la vida, con encanto, calidad y ese trato cercano que hace que siempre quieras volver. Muy recomendable tanto para vecinos como para quienes estén de paso por Segovia.

El arroz con bogavante de los jueves está muy bueno.

Muy buenas tapas. Tiene una carta de raciones variadas pero no las he probado.

Buen servicio y precio razonable

Qué bien cenamos hoy. Celebramos mi pre boda y estaba todo exquisito!!

Excelente restaurante. Cocina de calidad, servicio rápido y una decoración preciosa. Comí el plato del día por 17,50 €: ensalladillas (muy buenas), merluza (servida sin guarnición, pero con una salsa deliciosa) y arroz con leche. Realmente excelente a un precio tan bajo. Lo recomiendo.

Ha sido la primera vez que hemos comido fuera del menú, queríamos probar. Hemos compartido los tres platos que pedimos. El primero los judiones, buenos de sabor pero escasos de comparsa. Los calamares a la andaluza. Muy buenos por la textura yo diría que eran calamares de verdad. Además había alguna punta del extremo. La fritura buena y además no estaban grasientos. Por último alcachofas al ajillo con langostinos. Venían servidas sobre una cama de puré. El puré casero. Se podían notar los trocitos de patata y con un poco de mantequilla. Rico de verdad. Repetiremos para probar algún menú. El camarero súper amable y pendiente de si faltaba algo. Lo que menos me ha gustado es la acústica. Mucho ruido.