Suamu en Barcelona

Un sitio agradable en Les Corts. Hemos venido varias veces y nunca nos decepciona. Disfrutamos mucho de la comida. El personal es amable y, en general, el ambiente es agradable.

Comida buenísima y personal muy amable. Los precios son ajustados para la zona que está, así que muy recomendable!!!!!

La comida súper buena! 100% recomendable!

Fui a este restaurante y honestamente… *qué fantasía*. Desde que entré me atendieron tan bien que casi me sentí celebridad. El personal súper atento, buena onda y con una paciencia que ni mi mamá. La comida… **ufff**. Cada plato sabía como si la cocina tuviera un acuerdo secreto con el cielo. Probé varias cosas “por investigación profesional” (o sea, por tragona) y todo estaba delicioso. De esos lugares donde terminas comiendo más aunque ya estés lleno porque “¿cómo voy a dejar esto aquí?”. En resumen: buena vibra, buena atención y comida rica nivel “quiero volver mañana”. 10/10, recomendado para ir con hambre y con ganas de pasarla bien. 🍽️😄

Calidad precio insuperable. Atención de 10, 100% recomendable!

Muy recomendable para reuniones sociales. El lugar tiene un ambiente cálido y acogedor, comida excelente y un servicio encantador. Sin duda volveremos muy pronto.

¡Comer muy bueno y un servicio excelente!

La atención y la comida increíble. Volveré 100%

Recomendable Menú del día bien de precio en Les Corts, servicio rápido y local que se llena sin pausa: así se resume la experiencia en Suamu, un bar-restaurant que demuestra que no hace falta reinventar la gastronomía para triunfar… basta con hacerlo bien y sin hacerse de rogar. Y sí, aquí lo consiguen. El menú, por 15,90 €, mantiene ese equilibrio tan difícil entre variedad, cantidad y velocidad. Las fotos lo dicen todo: fideuá generosa con su alioli aparte, parmentier con huevo frito que entra por los ojos y raciones que no parecen calculadas por un contable con miedo a perder dinero. El sitio se llena —mucho y rápido—, lo cual siempre es buena señal, aunque también significa que conviene llegar antes de las 14:00 si no quieres ver cómo otros se comen tu fideuá mientras tú esperas mesa con expresión filosófica. El interior es agradable, mejor que la fachada deja imaginar, con mesas bien dispuestas y un ambiente que ayuda a que la comida sea fluida. El servicio es sorprendentemente ágil para lo lleno que está el lugar: platos que llegan en su momento, ritmo constante y esa sensación de que saben manejar la avalancha sin caer en el caos. Comparado con otros menús de la zona, Suamu gana por rapidez, raciones y relación calidad-precio. Un sitio perfecto para comer entre semana sin dramas ni esperas eternas. Consejo práctico: ven pronto, pide la fideuá si aparece en pizarra y disfruta del menú sin remordimientos: aquí se come bien y se come rápido.

Vengo muchas veces a cenar y siempre todo genial. Abren hasta tarde y el trato es maravilloso. Sobretodo muy bueno Jordan, que me atiende siempre con una sonrisa.