Richote en Vigo

Se come genial, a muy buen precio y con unas vistas espectaculares.

La comida es increíble y el trato sensacional. Para mí sin ninguna duda la picaña es la mejor que comí en mi vida.

Comida excelente y personal amable. Precios razonables considerando la calidad de la comida.

Buen producto al que acompaña una buena cocina y elaboración. El bacalao de diez, y todo lo que pedimos (volandeiras y chipirones) muy rico. Quizás incluso nos excedimos porque los platos son generosos. Botella de vino incluida entre 60 y 70. Además de lo amables que son disfrutaras de una terraza privilegiada sobre el puerto con el telón de fondo de las islas Cíes.

Fuimos a comer por las referencias y no pudo ser mejor acierto. Recomiendo las zamburiñas , el pulpo y la crema de queso tetilla con miel. El servicio de 10 Volveremos

Todo riquísimo, incluido el servicio. Tomamos zamburiñas y pulpo exquisitos, también lubina muy rica, además de la crema de queso de tetilla con mil, un postre delicioso. Hay que volver, aunque este en un sitio poco accesible.

Vistazas, comida rica salvo el postre pero extremadamente lentos en el servicio, nos tomaron nota 1 hora después de llegar... y las camareras se veía que no tenían muchas ganas, sobre todo la más joven. En respuesta al restaurante no se si la camarera está aprendiendo o no pero cuando se atiende al público hay que al menos tratar de poner una sonrisa... es una opinión personal y siempre desde el respeto. Lo de la espera no es mentira... 1h desde que llegamos hasta que nos tomaron nota pidiendo sangrías y cervezas mientras.... Me alegro de que tengan mucha gente y sea ese el motivo pero que esperamos mucho es cierto. También es cierto que una vez que empezaron a servir la comida fueron todos los platos seguidos... Mis comentarios puede verlos como algo constructivo para intentar mejorar, si prefiere verlos como algo destructivo ya es desde los ojos del que mira... desde luego no es mi intención

La comida estuvo bien pero había una comunión o similar al mismo tiempo y era un poco incómodo tener a un grupo numeroso de pie a tu lado. Me llamó la atención que nos sirvieran un plato de carne en tabla de madera… creía que estaba prohibido.

Terraza muy agradable. Comimos muy bien. Raciones abundantes. Muy rica la picaña. El camarero wur nos atendió muy amable. Volveré sin duda, quizás de noche para ver los astilleros iluminados.

Fenomenal calidad precio muy atentos ,bastante variedad, seguiremos llendo a cenar o comer,los dueños también son buen gente 😉