Restaurante Santa Comba en A Coruña

Una joya escondida en el centro de A Coruña!!!.. Restaurante a la antigua, pequeño y con una cocina como la de antaño... Aquí predomina el producto y la cocina tradicional, no esperes florituras!!... Cantidades generosas y trato amable!!.. El restaurante de barrio de toda la vida!! Sábado festivo 6 de Diciembre de 2025...3 personas para comer, con pan, vino, postre, café y un chupito de licor café 38€ todo!!

Un comedor de barrio como los de antes, con comida elaborada con productos frescos del mercado; todo sencillo y casero. Pescado excelente los viernes. Una visita obligada en cualquier viaje a A Coruña. Aviso: las raciones son tan grandes que dan ganas de comer a un obrero de la construcción. Después de comer, mejor dar un paseo o echarse una siesta.

Se come rico y abundante. Estaria bueno una sonrisa y no compartir la pota de la sopa entre todo el restaurant.

Muy casero, muy abundante y muy barato. 25€ dos personas una carne asada de locos y caldo y sopa rica + postre.

Un restaurante a la antigua, con menú platos del día con una comida de calidad excepcional. Sopa y carne en salsa que fue probarlo y recordarme la comida que me hacía mi abuela y eso no lo había conseguido nadie, nunca. No esperes florituras y no esperes una carta inmensa, aquí se viene a comer bien por 12'50€. Pan y vino de la casa todo el que quieras. Leí que las personas que llevan el negocio no eran las más simpáticas, no sé, yo todo lo pedí con una sonrisa y siempre me la devolvieron, no necesito más. Volvería una y mil veces

Es un local pequeño y que puede pasarse de largo, y sería una lástima porque os estríais perdiendo un buen sitio para comer. Comida casera, menú de primer y segundo plato más postre y café, costando unos 11€, una verdadera ganga, lo único, que hay que pagar en metálico. De primero me dieron a elegir entre ensaladilla o sopa, y elegí sopa. Te llevan tu ración a la mesa para que tú te sirvas lo que desees, si quieres menos, te echas menos, y si quieres todo, te echas todo, y he de decir que estaba buena y se notaba que era casera, consistía de caldo y fideos. De segundo había varias opciones, entre las cuales recuerdo chuleta, albóndigas y carne asada, que es lo que pedí. Me pusieron una buena ración de carne con sus patatas y un pimientito rojo, siendo la carne de ternera, la cual estaba muy blandita y jugosa, bastante rica, con la que me llené por completo, costándome acabar el plato. De postre pedí una natilla de chocolate, la cual no era casera, sino de supermercado. Creo que es uno de los mejores sitios para comer, ya que calidad/precio está genial, comida casera deliciosa y precio bajo. En esta ocasión no pude tomar fotos por la batería, una verdadera lástima, ya que la carne tenía muy buena pinta. Si vais y os encontrais con botellas en las mesas, no están reservadas, sino que las ponen para quien se siente y quiera.

Comida muy rica, totalmente casera y precio muy bueno. Muy recomendable, sobre todo la carne asada y el caldo. Se paga en efectivo

Por 12'50 € que vale el menú (primero, segundo, postre, pan, agua y vino), no se puede pedir más. Buen servicio. La cocina está a la vista, y se ve muy limpia.

Un casa de comidas de las auténticas, con excelente comida casera y de calidad, con un menú único a un precio más que razonable. Las señoras son entrañables y la clientela curiosa y variada: del barrio, trabajadores, gente joven y mayor, y últimamente algún turista despistado, al que le tienen que gustar los restaurantes auténticos y sin pretensiones.

He parado a comer por casualidad de visita en La Coruña. El menú que tocó era, lentejas o sopa de primero. Elegimos lentejas, acierto total. Caseras y con un sabor contundente. Nos encantaron. De segundo albóndigas o zorza. Ambas buenas. Las patatas caseras. La carne buena, aunque me quedé con ganas de comer carne asada. No quedaba. Los postres no son caseros, por lo que ni pedí postre. El café bueno. Por 12,5 € no se puede pedir más. La atención buena. Eso sí, aprovechad de ir pronto porque no creo que a las dueñss les quede mucho para jubilarse. Fecha actual, agosto 2025. Por cierto, no tenían leche de soja o leche sin lactosa para el café y solo aceptan pagos en efectivo. Tampoco es un sitio apto para veganos. A mí nada de esto me afecta, pero para que lo tengáis en cuenta. El local es pequeño, así que mejor ir temprano. Y las raciones, generosas, aunque sin pasarse de exageradas.