Restaurante Plaza del Conde en Toledo

Tolerable y asequible, ni más ni menos.

Desde el momento en que entras al Restaurante Plaza del Conde, la cálida y acogedora entrada crea el ambiente perfecto para una experiencia gastronómica inolvidable. La camarera fue increíblemente comprensiva, experta y de gran ayuda; un placer absoluto durante toda la comida. El ambiente es increíble, realzado por una música suave y agradable que invita a relajarse y disfrutar del momento. Todo el lugar está impecable, reflejando el cuidado que ponen en cada detalle. Nuestra comida llegó rápidamente y cada plato fue excepcional. El venado estaba excepcional: tierno y con un sabor que realmente impresionó. La sopa de pescado y marisco es una exquisitez excepcional; ojalá tuviera más para llevar a casa. ¿Y el pulpo con papa? Se deshace en la boca. “Un lugar fuera de casa que definitivamente puede brindar la calidez de una comida casera”. Muy recomendable. Humildemente Dr. Collazo

Fui con mi prometido este pasado Agosto y fue maravilloso. Comida toledana de calidad y, además, claramente casera. Es un restaurante que parece llevado por una familia. Guisos de toda la vida, atención cercana y calidad increíble. ¡Salimos de aquí pensando que habíamos pagado poquísimo con lo que habíamos comido! Si vais a Toledo, ni os lo penséis.

La comida muy muy buena, especialmente los platos que tienen perdiz, recomiendo también la costilla con una salsa muy buena, muy buen servicio y un sitio amplio y tranquilo

Excelente cocina y trato a los clientes además tienes gran variedad de bebidas de sobremesa con excelente calidad

Lo más que me ha gustado son asadillo con atún, estaba riquísimo, y profiteroles. El rabo de toro y la carrillera, para mi gusto, llevaban mucho aceite. Había un ambiente muy agradable, tranquilo y silencioso, y el servicio era bueno.

Muy buena experiencia. Comida estupenda y servicio muy amable.

Cocinero de 5☆, trato exquisito y local con clase. Judiones con perdiz, los mejores que he comido nunca. Huevos rotos, inmejorables

La comida increíble, la carrillada deliciosa, se deshace con rozarla, el venado también…es importante hacer bien el plato para que no se haga duro, y aquí lo han hecho delicioso. Los pimientos del piquillo muy muy sabrosos. Y la salsa para mojar pan. Los chicos que nos atendieron aún siendo jóvenes, que invita a veces por malos prejuicios a pensar que no tienen un servicio con experiencia, etc. fueron muy atentos y serviciales. Estuvimos muy bien servidos, fueron muy educados y estuvieron pendientes. Un servicio estupendo. Ha sido un placer comer aquí. Y caímos por casualidad. Totalmente recomendable.

Riquísimo todo! Y el dueño super amable, excelente servicio!!!