Restaurante Piedra en Limpias

No lo han recomendado y ha sido un acierto. La comida abundante y casera El servicio muy bueno el camarero juan Carlos el cubano fue el que nos atendió con un buen trato aconsejandonos y muy simpático igualmente su compañera y dueño sin duda repetiremos.

A ver, hacen unos picatostes con chocolate fantásticos. Si la comida que sirven es así, estaré encantada de volver y probar. Un lugar encantador y muy buena atención. Qué más se puede pedir??

Calidad ....cantidad y 13 euros el menú. Increíble

Sitio tipico para comer en limpias , sobre todo el chocolate con picatostes, el cachopo excelente, si te sales de lo típico bueno no esta mal, el servicio excelente.

Excelentes churros y chocolate caliente.

Excelente lugar . Comida casera riquísima y a buen precio . El personal es super amable Super recomendable . Además el chocolate con picatostes de 10 !!!

Pincho de tortilla bien bueno. Buenos precios Chocolate con picatostes SOLO por las TARDES … que lastima no pueda ser desayuno!

Este restaurante es un lugar donde te ríes de felicidad y tu español mejora automáticamente. ¡Todo un descubrimiento! El Hostal Restaurante Piedra es uno de esos lugares donde entras y piensas: "Sí, lo vamos a pasar genial aquí". Y eso fue lo que hicimos. Somos holandeses, pero nos sentimos como en casa enseguida. El personal es increíblemente amable. De verdad, se esfuerzan por hablar inglés, y solo por eso merece una ovación. (O en nuestro caso: un entusiasta ocupado con el traductor de Google). Hubo risas, señalamientos, gestos y apuestas, y al final, siempre acababa en la mesa justo lo que esperábamos. Y además estaba delicioso. La comida… bueno, no hay palabras para describirla sin romper a llorar de felicidad. Desde el entrante hasta el plato principal y el postre: es como si tus papilas gustativas estuvieran de vacaciones en un baño caliente de ajo y aceite de oliva. Y todo eso por unos precios que te hacen pensar: "¿Se nos olvidó cobrarnos algo?". En resumen: este es uno de esos lugares que te hacen extrañar tu hogar incluso antes de salir de casa. Nuestras vacaciones están a punto de terminar, pero antes de regresar a los desolados y grises Países Bajos, sin duda nos detendremos aquí una vez más. O dos. O tres.

Los picatostes están muy buenos, el trato de los camareros es excelente, el nuevo dueño va por muy buen camino con el hostal

Restaurante clásico y familiar de los de toda la vida. Raciones generosas y caseras, atención rápida y amable y magnífico entorno. Tomamos muchos platos y quizá lo mejor el cocido montañes, rico y de los que te dejan la cacerola para repetir. También buenas las albóndigas de ternera, la carrillera, la lasaña o las patatas que acompañaban algunos platos. El cachopo del menú quizá lo peor, estaba bueno pero era muy pequeño y fino. Los postres probamos el flan de orujo, la tarta de polvorón (tipo de queso pero con base de polvorón, suena mejor de lo que luego es) y la tarta de la abuela, para mi gusto (que me gusta más el chocolate y la galleta que las natillas) muy buena. También pudimos merendar en el sitio y los churros y picatostes con chocolate bastante buenos. Muy buen sitio para ir en familia.