Restaurante Monmar en Moncofa

Las raciones son abundantes y todo está buenísimo, en especial las alcachofas y la fideuá, que está al punto y muy sabrosa. La chica que nos ha atendido(Tania)ha sido muy amable y atenta. El ambiente es muy agradable y tienen una zona para que los niños jueguen.

Genial. Volveremos seguro. Buena comida, trato extraordinario y genial si vas con niños.

Ambiente espectacular, trato increíble y comida deliciosa!!!! volveremos seguro!!! Venimos adrede de Valencia por recomendación!! Acierto 100%

Comida muy buena y trato excelente.

Genial para ir con niños en verano

Restaurante y bar en el camping MonMar. Pequeña carta con varios tipos de platos y carta de bebidas. Servicio amable y habla inglesa. De la elección limitada, la elección realizada no se pudo ordenar dos veces. El vino blanco seco de la casa es bueno. Las croquetas y las patatas estaban bastante calientes, las croquetas tenían poco sabor, las patatas estaban ricas. Las mesas no están decoradas, había un televisor y música adentro.

Muy bien la zona de ocio y muy atento el servicio de cafetería y ocio

Buenísima la comida que comimos ese día. Muy recomendable

Hemos pasado el día en el parque acuático y hemos comido en el restaurante el menú diario, un solomillo que se deshacía en la boca y la fideua muy sabrosa, como recomendación la copa de postre de la casa. También destacar el carácter alegre y servicial de la camarera. Volveremos seguro.

Teníamos mesa a la 13.30, hora a la que llegamos. Nos toman nota. Pedimos lo de los niños, y acto seguido nuestros primeros y segundos. Pues bien el primer plato( ensalada pasable) llegó a nuestra mesa media hora después. Los platos de los niños, y menos mal los trajeron bastante rápido. Pues los segundos de los adultos (el mío cachopo, que no recomiendo para nada, con unos Pimientos que eran fuego en pleno agosto) llegaron a nuestra mesa casi a las 15.00, una hora esperando. Creo que en días festivos, o son previsores y contratan a más gente, o se organizan mejor, o ponen aforo. Lo que no pueden hacer es en un menú cerrado se pueda tardar taannnto en servir un primero, segundo y postre. Le pongo tres estrellas por qué en la piscina lo pasamos muy bien. Pero vamos, los casi 100 euros que nos gastamos entre la piscina, y la "comida eterna" no son ni mucho menos para repetir, al menos no en el restaurante.