Restaurante Maria Castana en Santiago de Compostela

Sitio superrecomendable Gran atención,muy buena comida Y un buenisimo servicio..

Es un restaurante enxebre (en positivo) donde tienes comida y productos gallegos.Tienen en cuenta las intolerancias y el precio es razonable.

Los callos brutales y la atención muy buena. Volveremos seguro!!!

Todo muy rico, buen calidad precio! Caldeirada de mexillons riquísima!

Le pregunté a la guía de la Catedral algún lugar de comida casera donde va la gente local y me recomendó este así que fui a probarlo. Cuando llegué me ofrecieron sentarme fuera del comedor, ya que las mesas que tenían en el comedor estaban reservadas ya, por mi ningún problema, es algo muy habitual cuando viajas sólo, no es la primera ni la última vez que me pasa, prefiero esto a que no me den de comer como en otros sitios. El local en sí es un sitio tranquilo, con no muchas mesas y que se ve bastante acorde a lo que es la ciudad, clásico. La camarera fue muy amable y el servicio fue bueno, me asesoró respecto las cantidades y así no me pasé de comida. Es un lugar donde cocinan comida casera, lo que yo comí estaba bueno, sin estridencias, pero estaba bien cocinado, bueno de sabor y las cantidades correctas. En mi caso comí un par de platos aparte de un caldo, más postre, café y varias copas de vino. Pagué casi 45 euros pero bueno, es algo habitual si vas sólo y no vas de menú diario, es el sino de viajar y de comer sólo, te sale mucho más caro, Los precios eran correctos para lo que comí, no diré que era super barato pero no me clavaron en el precio. Supongo que si vas con más gente y compartes primeros, más botella entera de vino te sale la comida por menos de 30 euros.

Le pregunté a la guía de la Catedral algún lugar de comida casera donde va la gente local y me recomendó este así que fui a probarlo. Cuando llegué me ofrecieron sentarme fuera del comedor, ya que las mesas que tenían en el comedor estaban reservadas ya, por mi ningún problema, es algo muy habitual cuando viajas sólo, no es la primera ni la última vez que me pasa, prefiero esto a que no me den de comer como en otros sitios. El local en sí es un sitio tranquilo, con no muchas mesas y que se ve bastante acorde a lo que es la ciudad, clásico. La camarera fue muy amable y el servicio fue bueno, me asesoró respecto las cantidades y así no me pasé de comida. Es un lugar donde cocinan comida casera, lo que yo comí estaba bueno, sin estridencias, pero estaba bien cocinado, bueno de sabor y las cantidades correctas. En mi caso comí un par de platos aparte de un caldo, más postre, café y varias copas de vino. Pagué casi 45 euros pero bueno, es algo habitual si vas sólo y no vas de menú diario, es el sino de viajar y de comer sólo, te sale mucho más caro, Los precios eran correctos para lo que comí, no diré que era super barato pero no me clavaron en el precio. Supongo que si vas con más gente y compartes primeros, más botella entera de vino te sale la comida por menos de 30 euros.

Me da la impresión de que ha cambiado de dueños y de carta. La comida no está mal.

Fuimos a cenar por un cumpleaños, llegamos tardísimo a la reserva aún asi´nos estaban esperando y nos sirvieron con mucho cariño. La comida riquisima, un sitio para repetir mil veces

Magnífica relación calidad precio.

Que en ocho sitio De Santiago no tengan mesa, y en este sí, es para mosquearse. Pero una vez que vas, lo entiendes. De lo que pedimos, lo mejor el lacón a feira, el resto muy normalito, incluso el caldo gallego flojo e insípido. Pero lo peor, el calor que pasamos, ya que decían que no funcionaba el aire y los ventiladores no daban suficiente aire. Recomendable, no;para volver, tampoco.