Restaurante Mare Nostrum en L'Alfàs del Pi

Ha sido un placer volver a este restaurante con motivo de la comida del día de Navidad. Tenían habilitado para la ocasión un salón grande que hay detrás del comedor que, a la sazón, dispone de un pequeño escenario. Las mesas estaban distribuidas dejando espacios amplios entre ellas. Los platos del menú, elegidos muy acertadamente para el público de diversas nacionalidades que frecuenta este restaurante. La elaboración de la comida, muy cuidada, con ese toque distinguido que requería la ocasión. El servicio discurrió a buen ritmo, muy de agradecer en ocasiones como ésta, en las que hay muchos comensales. El personal, profesional y atento. El detalle de la copa de cava de bienvenida fue muy acertado y más, los vinos que nos sirvieron después, de una calidad inusual en este tipo celebración. A los postres, comenzó una actuación musical, en consonancia con el restaurante porque resultó entretenida y elegante. Da gusto cuando uno va a un sitio y acierta. No puedo poner un pero. Lo recomiendo y mucho.