Restaurante Marcos en Gijón

La comida estuvo exquisita y deliciosa. el servicio excelente haciendo una experiencia gastronómica muy agradable.

Precioso restaurante donde fuimos a disfrutar del menú degustación largo. Lo tomas en 3 ambientes diferentes, unos aperitivos justo en una pequeña barra en la entrada, luego en unas mesas en el pasillo tomas los entrantes y ya pasas al comedor para el resto de la cena, cruzando por la bodega, que por cierto tiene vinos muy interesantes. Las mesas rodean la cocina que está justo en el centro y abierta, por lo que puedes ver cómo trabajan. El personal, encantador y muy profesional. Todos los platos están a la altura de lo que esperas encontrar en un restaurante con estrella Michelín. Vale la pena probarlo, saldrás encantado!

Fui el pasado 20 de octubre y es muy impresionante. La comida fue increíble La tartaleta estaba muy rica y el servicio fue muy bueno. Volveré en el futuro. ¡¡Definición!!

La mejor experiencia gastronómica que he podido imaginar. Desde el primer aperitivo que te presentan al entrar, hasta el último postre. Plato tras plato te van sorprendiendo, explicándote todo lo que vas a degustar. Puedes ver el proceso de elaboración en todo momento. Bien merecida su estrella Michelín, merece más. Su bodega es espectacular. El personal todo un encanto, siempre atentxs a todas nuestras necesidades. He de aclarar que, según Google, solo admite pago en efectivo; no es así, se puede pagar con tarjeta sin problema. Gracias Chef Marcos y equipo.

Marcos Gijón – Una experiencia culinaria refinada El restaurante de una estrella Marcos en Gijón impresiona por un concepto bien pensado que se nota desde el momento en que entras. El recorrido desde el bar, a través de un pequeño salón, pasando por la bodega y hasta el comedor con cocina abierta, crea una atmósfera única. La decoración es clásica y moderna, lo que contribuye a crear un ambiente muy agradable. El servicio es extraordinariamente profesional y atento. Los platos y bebidas se sirvieron en el ritmo y momento perfectos. Las solicitudes especiales se atendieron sin esfuerzo y las recomendaciones de vinos fueron excelentes. Particularmente digno de mención fue el hecho de que, como únicos huéspedes en el restaurante, nunca nos sentimos incómodos, un verdadero testimonio de la hospitalidad excepcional. El menú ofrecía una notable variedad de sabores y texturas, todos muy bien presentados. Lo más destacado fueron los fideos de atún a la parrilla y el postre "Selva Negra", los cuales destacan como obras maestras culinarias. La relación calidad-precio es de razonable a excelente, especialmente con los menús que se ofrecen y la copa de champán, que tenía un precio excepcional. En general, la visita a Marcos fue un viaje culinario exquisito de aproximadamente tres horas. Para cualquiera que valore la comida extraordinaria en un ambiente elegante con un servicio excelente, Marcos es muy recomendable. Si la calidad se mantiene en un nivel tan alto y constante, el nombre Marcos seguirá ganando reconocimiento. Un sincero agradecimiento a todo el equipo por esta velada excepcional y su alto grado de profesionalidad.

Restaurante brutal en Gijón. Muy buena experiencia a través de su menú con distintos platos variados y muy ricos. El sitio está muy bien ambientado con la cocina en el centro y las mesas rodeándolo, se puede ver lo que se va cocinando en todo momento. Muy recomendable, salimos rodando!

Un local expectacular, una experiencia total. No voy a desvelar lo bonito de la experiencia. Pero la verdad que nos encantó. El trato, el tiempo que se toman para todo y su cercanía es de agradecer, te sientes como en casa. Los platos, la presentación y el ritmo entre uno y otro están medidos para el máximo disfrute. Sin duda un acierto la elección. El menú completo es abundante, ir con hambre o sin merendar o sufriréis para acabar jaja 10/10

Comida deliciosa y una experiencia excepcional, realzada por un chef bilingüe que explicó los fantásticos ingredientes utilizados en cada plato especial. Sin duda la mejor cocina de Gijón.

Experiencia recomendable. Empiezas en la barra con un pequeño entrante, luego te pasan al salón y finalmente te sientas en la mesa. Personalmente el menú va de menos a más. El personal super amable y atento.

El trato excelente, la sala de muy buen gusto con la cocina abierta en centro del restaurante El chef se acerca a las mesas y te explica los platillos Exquisito todo el menu y la presentación magnífica Muy recomendable