Restaurante Maraña en Barcelona

Entramos y nadie nos sentó bien, pero bueno, no somos nada exigentes. Así que nos sentamos después de unos tres minutos de espera incómoda (no había nadie más) y pedimos. Pedimos y la comida era carísima para lo que nos sirvieron después de unos cuarenta minutos de espera. La comida en sí estaba muy buena, pero el servicio fue un poco flojo. Sin ánimo de ofender, lo juro, sé que a veces la gente tiene días raros. Pedimos las tortitas, el velo y el tartar de atún, por cierto. El tartar era muy pequeño, así que no me llenó del todo. Mis hijos seguían teniendo algo de hambre. En total costó unos 55 euros. Recomiendo este sitio, pero no pidan el tartar, ya que no es mucha comida si tienen mucha hambre.

La comida estuvo increíble y el servicio fue excelente. La paella de marisco es la mejor de Barcelona.

Comida buenísima, ¡lo recomiendo sin duda!

La comida era muy buena y el servicio era muy bueno.

Restaurante/bar en la calle principal de Barcelona. Al principio teníamos algunas dudas, ya que estamos acostumbrados a que la comida no sea de primera en estos sitios. Pues bien, aquí nos llevamos una grata sorpresa. Paolo nos atendió de maravilla. Nos ofreció platos del día y nos convenció para que probáramos el risotto especial del día con langosta. El risotto estaba realmente excelente y bastante abundante. El postre también estuvo excelente. Y ahora, hablando de los cócteles, volvimos unos días después porque los cócteles que probamos la primera vez nos aburrieron mucho. Sobre todo el Hugo Maraña Spritz. Una versión interesante del famoso "Hugo Spritz", pero con manzana verde. ¡Un auténtico deleite! El ambiente del restaurante, tanto en la calle como desde dentro, es muy agradable. Gracias a todos por dos agradables veladas y una comida y bebidas excelentes.

¡Realmente delicioso! ¡Volvería otra vez!

La comida estuvo genial y el servicio de Anthony fue estupendo.

Terraza muy acogedora, servicio de 5 estrellas y una excelente sugerencia de Paolo, que fue muy amable. Lo recomiendo muchísimo. ++++++++++++++++++++++++ Un beso enorme de la Reina.

Buen restaurante: un poco caro, pero comimos muy bien. Camareros amables y una decoración preciosa.

Muy rica la comida y Paolo nos ha atendido y guiado muy bien.