Restaurante Los Lagos Bar Maria Rosa en Cangas de Onís

Fue un acierto parar a almorzar! Comimos paletilla de cordero y fue un espectáculo! Atención rápida y muy amables. Una grata sorpresa y de frente al lago Ercina.

Un trato inmejorable. Hoy en día quedan pocos restaurantes de los de toda la vida, con ese ambiente acogedor, cocina asturiana auténtica y unas vistas privilegiadas al lago Ercina.

Las porciones son abundantes. La comida está bien, pero nada del otro mundo. Parece más recalentada que recién hecha. El servicio es rápido. En general, un buen lugar para comer cerca de los lagos.

Lugar con una localización privilegiada y una muy buena opción para comer si subes a los Lagos de Covadonga. Nosotros fuimos por la buena experiencia que recordábamos del plato del cabritu, y exactamente cumplió nuestra expectativa respecto a la vez anterior. La atención de los camareros era muy buena y se preocupaban de que todo estuviera bien y no faltará nada.

Hace un tiempo que fuimos y ahora que volvemos por allí nos gustaría poder volver a degustar su comida en un paisaje espectacular,entramos a por unos bocatas y estaba el local a tope de repente una mesa quedo libre preguntamos si podíamos acceder a ella y nos dijeron que si,y nos sentamos a comer de plato.una carne guisada espectacular con guisante patatas etc bueno sin palabras de lo bien comimos allí,esperemos ahora en septiembre podamos volver a esta casa.gracias.

Buena comida a buen precio, con unas vistas preciosas

Todo perfecto comida, vistas pero sobre todo una camarera, Patricia, que nos sirvió y trató muy bien, yo la quisiera para mi restaurante en Mallorca pero le tira mucho su tierra.

Calidad precio estupendo El personal muy atento y muy profesional Lo recomiendo y si vuelvo a los lagos repetiré

La comida está buenísima y el personal encantador! Si volviese a ir no dudaría en comer allí, tienen menú y carta y todo a un precio dentro de lo común para estar allí arriba, recomendable 100%

Hola, almorzamos un sábadu d’esti pasáu mes de xunetu. Unes selmanes antes fiximos la reserva, asina que ¡genial! Llegamos y al entrar, un sitiu acoyedor, bones vistes de xuru, anque esi día caía un calabobos y había niebla. Dieronmos la mesa pa seis y Héctor, el dueñu, esplicónos y recomendónos dalgunos platos. Pillamos dos platos por persona y la verdá ye que tán buenísimos: el cabritu asáu y les chuletas de ternera kilómetru cero… ¡qué bones, cantidá y calidá! Los platos que lleven acompañamientu de patates caserinas. Tuvimos un ratu de cháchara antes de pedir los postres, que si non, no nos entraban. Caserinos, sabrosos… un manjar. Calidá, preciu y serviciu: 100% recomendable. ¡Menuda fartura!, la mía bien regada con unos culines de sidra. Héctor, fízistenos pasar un bon ratu, gracies a ti y a tol to equipu. Pa la próxima xubiré col mio Land Rover 109 especial del 78. Un abrazu, familia, y recuerdos pa Sergio, el taxista de los lagos. Dani Guirado