Restaurante la Proa en Mazarrón

La ubicación del restaurante es sin duda uno de sus puntos fuertes. Tiene una terraza muy agradable con vistas al mar —aunque hay una carretera de por medio, apenas se escucha el tráfico, y el aire fresco hace que se esté de maravilla. Es un sitio ideal para comer al aire libre y relajarse. Los baños están adaptados y en buen estado, algo que siempre se agradece. En cuanto a la comida, el menú costaba 16,50 €, lo cual está bastante bien en cuanto a cantidad, pero en la elaboración se notaba falta de mimo. No estaba mal, pero no destacó especialmente. El mayor problema fue el servicio. Llegamos a la 13:30 y no salimos hasta pasadas las 15:30, a pesar de que el restaurante no estaba lleno. La camarera iba muy tranquila, y eso se notó en los tiempos de espera. También cuando pedimos la cuenta no había manera de que se pasara por nuestra mesa para cobrar... Fue y también no me gustó que todos los platos se pongan a la vez en la mesa. Otro detalle que no me gustó nada fue el aceite. En las mesas pusieron botellas rellenadas, algo que no debería permitirse. En mi opinión, si estamos en España, y más aún si yo vengo de Jaén, lo mínimo es que el aceite sea virgen extra y de cooperativa de Jaén no algo relleno de otro que a saber... Por todo esto, le doy 3 estrellas. Buen sitio para estar, pero con margen de mejora en cocina y servicio.

El precio y la calidad son buenos, pero hay escasez de personal en el restaurante, lo que significa que hay que esperar demasiado y hay que avisar a la camarera de que se está tardando demasiado en preparar el siguiente plato, lo que desgraciadamente destroza el ambiente.

Delicioso menú diario por 15 euros. 3 platos y una bebida gratis. El servicio fue muy amable.

Buen restaurante estuvimos muy bien y comimos genial, calidad precio bien y lo mejor las vistas ☺️

Restaurante ubicado en Mazarrón junto a la Playa del Almillo. Tiene menú, incluyendo los fines de semana, y carta clásica de platos propios de la cocina mediterránea: gambas, croquetas, calamares, embutidos, ensaladas, varias carnes y varios pescados. Tienen terraza cubierta y un pequeño comedor junto a la barra. Fácil aparcamiento en la calle cerca del restaurante. Servicio rápido y agradable con el cliente.

La comida encantadora y el personal es muy amable y servicial.

No pedir caldero. No se parece en nada a la receta original. No estaba malo pero era más bien un arroz "caldoso" al que le faltaba sabor. Los entrantes suficientes. Una pena porque habiendo pedido otro arroz seguramente habría sido una experiencia mucho mejor. Entorno y servicio muy buenos