Restaurante Kingyo en Barcelona

19/07/2025: Pros: Buena comida, buen ambiente. Contras: Poca selección de bebidas. La cuenta era demasiado cara; añadieron un plato extra y aumentaron las bebidas. Tuve que hablar con el camarero para que me diera la cuenta correcta. Arruinó un poco la experiencia; no creo que vuelva.

30/06/2025: Junto al buque insignia de la familia Kao, el mítico Shangai, este espacio de comida oriental se presenta como una salida más económica para degustar platos excelentes. El local es agradable, oscuro, íntimo, con alguna concesión a su carácter oriental, pero decorado en una línea actual. Las mesas reciben las luz de unos focos altos que resaltan básicamente los platos servicios. Es un lugar de parroquianos a los que el servicio atiende con validez ¿Poco profesionales? En absoluto: trato amable y próximo ¡Da gusto sentirse bien tratado¡ Y con un poco de suerte, el señor Josep Maria Kao se sentará en tu mesa para interesarse por tu grado de satisfacción. Las cartas es limitada, pero excelente. Uno puede dejarse aconsejar y saldrá satisfecho, aunque las raciones sean un poco escasas. No hubo a penas tiempo de espera. Hay una bodega de muy buenos vinos. No aptos para todos los bolsillos. Pero qué queréis: estamos en la parte alta de Barcelona: Qui no vulgui pols, que no vagi a l'era! Si una objeción he de hacer de mi experiencia por este lugar es la música que, por lo menos durante mi visita, sonaba excesivamente alta. No debería haber música en los restaurantes: si uno va al que quiere, escoge la comida que quiere y la bebida que le apetece... ¿Por qué se le impone una música concreta que, además de contribuir al ruido de fondo de las voces, puede no ser del agrado de los clientes? Es el único pero que le pongo al lugar, pero, por lo demás, EXCELENTE.