Restaurante Hostal Colomi en Santa Coloma de Queralt

Desde el año 1988 que voy a comer allí cuando me es posible. Siendo viajante he comido en muchos restaurantes; pero El Colomi; diría que es "especial de bueno"

Magnífica comida y servicio El precio del menú perfecto

todo perfecto, cuidado y sensacional. comida tradicional, brasa de cine. Bien llevado. un placer comer aqui

Es uno de esos restaurantes que uno no se cansa de volver, desde la primera hasta la última vez, las experiencias siempre han sido satisfactorias (cosa extraña a día de hoy)...el servicio, la comida , el ambiente son cosas que hacen un todo para que salgas con ganas de volver, y el precio es acorde con lo que te sirven...pasan los años y todo es como antes...y lo bueno es que parece que la generación que viene detrás sigue el mismo camino.

Deliciosa comida tradicional catalana. Negocio familiar. Menú semanal por 24eu. ¡Pasamos por el camino e hicimos un descubrimiento increíble!

Como siempre...... El Colomino de las hermanas Camps, un muy buen restaurante

Comiendo aquí es imposible q te equivoques p q está todo super buenisimooooo Son un amor de atentos y siempre pendientes de todos los comensales Son una estrella michelin Totalmente recomendable

Puesto curioso con buena cocina, servicio hirviendo, buenas opciones para elegir y bien aconsejado.

Después de comer muchas veces en este restaurante único, finalmente pedí su ‘escudella i carn d’olla’. Estaba delicioso, excelentemente cocinado. Este restaurante de gestión familiar ofrece comida catalana de calidad, una verdadera experiencia. Mantiene la esencia completa.

Lo primero que te das cuenta cuando llegas a este restaurante es que, a pesar de tener una gran cantidad de mesas, está lleno y tendrás que esperar turno. Cuando ya dispones de la mesa te encuentras, de entrada, con dos porrones de vino (blanco y negro) una botella de aceite de oliva, de vidrio, y un pequeño recipiente con sal. El menú diario (22 euros) es bastante amplio y de excelente calidad. El servicio es familiar, próximo y super eficiente. Vale la pena destacar este aspecto, ya que no es habitual encontrar un restaurante con tantos clientes y que con un personal tan limitado sean capaces de atender tan bien y tan rápido. El local en si es no tiene nada destacable, a no ser una brasa, con fuego permanente, que le da calidez y sabor al producto y a la sala. El éxito de este restaurant no es casual, es extremadamente meritorio y un ejemplo para un servicio de sala que, en general, cada vez resulta ser más deficiente. Un saludo a las hermanas Camps por su atención y amabilidad.