12/05/2025: Buenísimo.
Tanto la comida como el trato fueron espectaculares.
04/05/2025: Acabamos de llegar a vivir hace poco a Talavera y en todas partes habíamos leído maravillas de este restaurante, así que nos decidimos a reservar para comer. La sala es muy bonita y acogedora, decorada para que te sientas como si estuvieses en una casa particular. Al principio te ponen un aperitivo de cortesía consistente en berenjenas en tempura, deliciosas, que ya te hacen intuir que la comida va a ser excepcional. De entrante pedimos Alcachofas con Fúa, que puedo decir con son las alcachofas mas ricas que me he comido en mi vida. Están confitadas en aceite, con verduras, sal negra y sésamo de wasabi, coronadas con una esfera de helado de fua que es sencillamente increíble. También de entrante pedimos unas croquetas de la chef, super crujientes y con un relleno cremoso que no puede ser más perfecto. De plato principal mi esposa pidió un bacalao con confitura de pisto del que solo habla maravillas. Yo pedí una migas de pastor, con chorizo, pimiento, torrezno y huevo, acompañadas de unas uvas. Plato casero y clásico pero que está ejecutado a la perfección, buenísimo. Para terminar, de postre mi esposa eligió la torrija en textura, caramelizada con soplete y coronada con una esfera de maíz rellena de salsa de torrija y yema de huevo. Yo pedí la quesada a la antigua, una tarta de queso manchego deliciosa. Ambos postres a la altura de todo lo demás. La chef, Piedad Zánchez, en todo momento presente explicando sus platos, y ayudando en labores de sala, lo que dice mucho de su calidad como profesional y persona. El personal de sala impecable, atentos en todo momento, el vino fue un Ribera de Duero recomendado por ellos y resultó ser excepcional. Por lo tanto solo podemos hablar maravillas de este restaurante de alta cocina, pero que no olvida la casera cocina manchega y andaluza de las que Piedad es absoluta conocedora. Absolutamente recomendable, un deber visitarlo en Talavera.