17/01/2025: Un gran hotel, que no es el típico hotel de fiesta de Ibiza.
Las habitaciones son muy amplias y están bien equipadas. También están muy limpios y no anticuados.
La ubicación del hotel es muy tranquila, ya que está lejos de la "milla de fiesta". La ubicación directa en la playa perfecciona la ubicación.
La comida es deliciosa y los restaurantes nunca están abarrotados.
Las piscinas son un gran lugar para relajarse. El Spa Zentropia ofrece oportunidades perfectas para relajarse.
El hotel ofrece una tarifa todo incluido que es muy recomendable. Esto es muy inusual en Ibiza.
15/01/2025: Un hotel muy decente para unas vacaciones en familia. Territorio grande (también puede utilizar los servicios de un hotel cercano),
varias piscinas, un número suficiente de bares y restaurantes. Personal muy amable.
Nos alojamos en el hotel en la segunda quincena de octubre. Ya no es la temporada. Pero el hotel estaba lleno. Incluso un par de veces hubo cola para cenar.
El check-in es bastante rápido. La llave de la habitación está en la pulsera. La habitación para tres consta de una cama doble y una silla plegable. El conjunto habitual de cosméticos (gel de ducha, champú), albornoces, zapatillas. El minibar contiene agua, cerveza, cola. Se repuso el agua, pero el resto no. Set para té, café. El aislamiento acústico es bueno. Internet también. Limpieza todos los días.
¡La comida es de primera categoría! Visitamos todos los restaurantes a la carta (regístrese para una visita cerca de la recepción). Nuestro favorito es Il Palazzo. Puedes acudir al restaurante Portofino tanto para el almuerzo como para la cena.
Hubo entretenimiento todas las noches.
El agua de la piscina estaba muy fría, unos 19 grados, en el mar - 25
Las toallas de playa se proporcionan sin depósito.
El aparcamiento en el establecimiento cuesta 15 € al día, pero en las inmediaciones es gratuito.
Le di al servicio un 4 por problemas menores. Pagamos una habitación para tres adultos. Pero faltaban la tercera bata y los suministros de té. Le pedimos a la criada que trajera lo que faltaba, solo trajo una bata de niño pequeño(!), todavía no entendemos por qué. Y al tercer día algunos bares se quedaron sin cava blanco (aunque otros lo tenían, pero falta mucho :)) y no apareció hasta que nos fuimos. Son pequeñas cosas que no afectan en absoluto a tu estado de ánimo ni a la calidad del descanso. El hotel es genial, nos gustó.