Restaurante Ermita de Brugues en Gavà

El espacio exterior tiene unas vistas fantásticas y está muy bien. Comimos un entrante compartido y espárragos de margen, que no lo eran sino que eran espárragos verdes y solomillo a la brasa muy tierno.

Muy buen sitio para comer, especialidad en carnes a la brasa, servicio muy profesional y cercano! Vamos en muchas ocasiones! Precio correcto y buenas raciones!! También hemos desayunado botifarra cuando pasamos en bici!nos encanta

Muy buena comida, restaurante con buenas vistas en el salón exterior. Para desayunar sin reserva antes de las 11. Para comer hay que hacer reserva. Es probable que vayas sin reserva y no haya sitio y te tengas que ir.

Tuvimos que esperar mucho a que nos dieran la cuenta y el trato no fue muy amable

Vista son increíbles y la comida excelente y el servio con una risa siempre gente con un humor muy bueno 👌 10/10

El lugar y el servicio es lo más destacable, sobretodo el servicio. Unas vistas muy bonitas, y un servicio muy amable. La comida está bien, pero sin más. La peor, probamos unos caracoles que, estaban muy sosos y unos espárragos que tampoco repetiría. Lo mejor, unas croquetas de pollo muy ricas, un pan con tomate y alioli suave muy rico, junto lo que más nos gustó, la sepia. La mejor que hemos probado hasta la fecha. Otros entrantes variados y un alioli excelente, pero todo con un precio algo elevado. También sirven un buen café que también suma.

Buen menú diario por 18€. Incluye pan tostado, tomates, ajos y alioli. Incluye agua y vino. Mucha variedad de platos (algunos con suplemento). Especialidad en brasa. Buen y rápido servicio. Si el comedor está lleno, es algo demasiado ruidoso.

El lugar es muy bonito, e incluso algunos de los salones y terrazas tienen vistas muy chulas. Respecto a la comida, creo que a nivel de entrantes le falta bastante mas variedad, pero en general estaba todo muy correcto. Relacion calidad/precio mas que correcta.

La gente a menudo me pregunta por lugares para comer comida típica catalana en Barcelona. Y esa es una pregunta complicada: no hay tantos restaurantes catalanes en Barcelona. 😔 Bueno, por supuesto, hay algunos, pero no son tan comunes al final, en comparación con otros tipos de lugares. O no me parecen geniales. Así que a menudo sugiero salir de la ciudad, donde hay un montón de "masías" (una "masía" es el edificio principal de una casa grande, a veces utilizado como restaurante hoy en día) que sirven comida catalana. Hace varios meses, nos encontramos con nuestros amigos a 20 km de BCN, en Ermita de Brugués (@restaurantermitadebruges). Salir de la ciudad también significa más espacio para grandes fiestas. Y en ese caso éramos como 12 adultos y 6 niños. 😅 Compartimos unos cuantos entrantes y cada uno tuvo su propio plato fuerte. Y uno de estos entrantes fueron, por supuesto, 🐌. Es increíble cómo cada restaurante logra sacar una versión diferente del mismo plato de 🐌. 👏 Yo 💙d estos, con un montón de hierbas, súper sabroso. 👍 Luego tomé un poco 🐑, que estaba bien. Y terminé con un 🍮 que estaba bien. En general, la comida era buena y el precio era correcto, alrededor de € 30 cada uno por buena calidad y cantidad. El lugar en sí también estaba bien: había espacio fuera para que los niños jugaran y desde nuestra mesa teníamos una vista al valle... desafortunadamente tuvimos demasiado tiempo para ver esa vista porque el camarero básicamente se olvidó de nosotros. Tardamos siglos en conseguir la comida, que podría haber estado bien ya que estábamos entre amigos, pero no estaba bien para los niños que tuvieron que esperar demasiado tiempo. Tuvimos que pedir la comida, las bebidas, la cuenta tantas veces! Este es el tipo de cosas que realmente estropean la experiencia y no creo que nadie se fuera feliz de ese lugar. 😠 Calidad y sabor: 8 / 10 Cantidades: 8 / 10 Atmósfera: 7 / 10 Originalidad: 6 / 10 Relación precio/calidad: 7 / 10 Servicio: 1 / 10 Cómo me sentí después: 5 / 10 Más en IG: @runnerandfoodie

El sitio tiene mucho encanto, la comida está buena, pero en mi opinión la calçotada se queda corta: lo normal es que tengas calçots prácticamente sin límite, pero aquí estaban contados por comensal y eso nos decepcionó mucho. Al comentarlo al camarero, parecía que nos perdonaba la vida. Quizás de menú sea mejor.