Restaurante Casa Paca en Sarracín

Es nuestro segundo año que vamos allí y fuimos a comer sobre la 13:15 o así y éramos 3 personas y nos atendieron súper rápido, la chica es muy maja y súper amable, aparte si eres celiaco te sacan pan sin gluten, hacen la comida muy buena. Súper atentos, la comida excelente en todo, recomiendo ir 100%.

Comida muy rica. Las pochas con codorniz estaban espectaculares.

Restaurante pequeño y acogedor, es mejor reservar. Durante la semana tiene un menú a 16€, con platos caseros muy bien elaborados, pero te puedes saltar un poco el menú y pedir alguno de los platos especiales que siempre tiene. Los fines de semana el menú es especial al rededor de 25€, los platos que ofrece, casi siempre son de excelente elaboración y cantidad. Son destacables, el bacalao al pil pil y los boletus en salsa de trufas, ambos extraordinarios. En temporada de setas organiza jornadas gastronómicas con menús especiales. Para no perderselo.

Comida casera en un comedor familiar. Encantados. Menú 15 €

Llegamos aquí por casualidad buscando en dónde comer en Burgos. Probamos el menú de fin de semana. Se aprecia un esfuerzo por hacer algo diferente, esto se agradece, pero le falta un poquito. La atención es tal vez muy seria, pero realmente eficiente. El lugar está bonito, pequeño y acogedor.

Ambiente agradable, pero el menú 16€ es caro para la calidad-cantidad.

Camino de Santander hicimos una parada en este local luego de ver unas valoraciones en Internet y salimos muy satisfechos ....volveremos!!

Restaurante Casa Paca (Sarracín) es un lugar muy, muy pequeño, pero a la vez acogedor, ideal si buscas un ambiente tranquilo y sencillo. Ofrecen menú del día por 16 €, un precio que resulta algo elevado teniendo en cuenta la poca variedad de opciones disponibles. El primero se puede elegir entre gazpacho (que viene sin ningún topping), coliflor rehogada o macarrones. De segundo, las opciones son pavo en salsa con patatas o pescado. Si bien la selección es bastante limitada, cabe destacar que los postres son caseros y realmente deliciosos, sin duda lo mejor de la comida. El menú incluye una bebida y el postre, aunque el café se cobra aparte. En cuanto al servicio, la atención fue buena, amable y correcta, lo que aporta un punto positivo a la experiencia. En resumen, un sitio sencillo y acogedor, con buena atención y postres caseros muy ricos, pero cuyo menú del día puede resultar caro para la variedad que ofrece.

El lugar es muy pequeño, así que cualquier conversación satura el ambiente de ruido. La. Comida estaba correcta. El servicio frío, parecíamos más una molestia que unos clientes. El precio (16 euros el menú de entresemana) no se corresponde con lo ofrecido

La chica que nos atendió es un encanto. La comida muy buena, servicio rapido. Apuntado el sitio para volver en el siguiente viaje