Restaurante Casa de Fideos Hongjie en Sevilla

Comida china bastante auténtica. Está un poco alejado del centro de la ciudad pero si vas en coche son como 15 min. El estofado de pescado es increíble 🤩

Se come bien y tienen un buen precio,las cantidades son abismales,lo único malo es que tardó bastante en traernos la comida pero por el resto está notable.

El restaurante chino de los chinos en Sevilla. Aparcamiento seguro un viernes o sábado por la noche, es un polígono jajaja. 4 platos para dos personas es imposible la verdad. Los de la foto son las berenjenas y el tofu japonés que no tiene nada que ver con el que encontramos en un supermercado, este es un flan casi. Los otros dos platos tallarines salteados y las empanadillas que seguramente sean los mejores de Sevilla. Las berenjenas son mis favoritas pero las empanadillas y fideos en todas sus versiones son obligatorios. Los precios son de risa también podrías comer solo pidiendo un plato de fideos salteados y beber agua del grifo por 6€

Solo entre para comprar comida para llevar. La calidad y el precio escelente. Y además bastante producto. A simple vista es pequeño ,pero muy concurrido. Ademas muy rápido y muy buena atención.

La comida es excelente: sabrosa, abundante y a un precio más que razonable. Solo por eso se merece las cinco estrellas de largo. Me debato en lo relativo al ambiente porque, por un lado, el local no es muy bonito, pero por otro tienen habitaciones individuales para los grupos que hace que haya menos barullo en el salón, y es un detalle que se agradece. En cuanto al servicio, correcto y diligente, aunque quizá falta una pizca de simpatía. En definitiva, en total le doy un 5, y espero no ser muy duro con lo demás, pero si hay algún pequeño margen de mejora, no creo que sea malo hacerlo ver.

Comí allí un sábado, la verdad de imprevisto, sin expectativas, pero la verdad que me sorprendió muchísimo la calidad de la comida y las cantidades que te ponían por el precio que costaba, sinceramente maravilloso.

He venido a jugar y que simpático el juego ¿simpático? ¿Sim pático?? ¿sin paticoo? ¡¡SIN PATO!!, ¿sin Patri?, si. HABÍA PATO. Que maravillosa criatura he cocreado, he podido compartir. ¿Compartir? ¿Com partir? ¡¡CON PARTIR!! ¿con Patri?, no. Se supone que venía solo a comer algo, pero POR DIOS, que eskisito buoooaaaaa buaaaaaaaaaaao chaval (Que no buey, no hay buey en la carta) Qué hay en la carta se preguntará el lector. EN LA CARTA HAY COSAS RIKISIMAS, pero no hay buey ni hay Patri. Los tallarines con costillas estaban en su punto, recomiendo el plato. Hubo un momento de batalla, ¿se puede compartir? No y si, pero se destrozaron las lanzas y trajeron cuenquecitos, que son los de mi casa, y todo fueron sonrisas y nada fue competición ¿competición? ¿com petición? ¡CON PETICIÓN! ¿con Patri? QUE NO. La petición fue resuelta con amor y compasión y esta comida tiene un hueco en mi corazón. Los globos no están a día de hoy, se echa en falta tanto corasonsito en mi vida.

Muy autentica comida china, sitio escondido pero vale mucho la pena. No decepcionó el arroz tres delicias y los tallarines espectaculares. Recomiendo pedir carne y personalmente no disfrute del cangrejo.

En principio no teníamos pensado ir allí, al final lo descubrimos de casualidad. Fui con mi pareja y la verdad, me alegro haber ido. Normalmente estoy acostumbrada a restaurantes chinos típicos en el centro de la ciudad (rollito de primavera, arroz y un plato de carne o algo así). Cuando llegamos allí, indico que hay que subir un par de escalones así que puede ser un poco difícil el acceso a personas con algún tipo de discapacidad. Las mesas son muy amplias y limpias. Cada mesa tiene botes de salsa de soja, una salsa bastante picante la cual no identifiqué, servilletas y un recipiente con muchos palillos, ignoro si tienen tenedores ya que nosotros usamos los palillos. Pedimos un plato cada uno y otro para compartir (tallarines salteados, tallarines con ternera -estos los ponen como si fuera ramen con sopa- y unas empanadillas). La comida estaba muy buena, de hecho por eso he comentado antes los "típicos restaurantes chinos", ya que estos platos me sabían mejor, más sabrosos y con más condimentos que normalmente en otros sitios no ponen. He de decir que tardaron un poco en poner uno de los platos pero valió la pena. No pedimos postre porque no podíamos más, estábamos hasta arriba. En total la comida con 2 bebidas fueron 21 euros por los 2. Volveré para seguir probando el resto de la carta!

Buena relación calidad precio, restaurante muy auténtico con un ambiente local. Pedimos 6 para 5 personas y acabamos bien. Los tallarines salteados, arroz salteado, tiras de cerdo, gyozas y ternera a la plancha espectaculares. El pollo picante muy muy picante (nos avisaron) y huesudo. Mucho intervalo entre platos