Restaurante Calma Chicha en San Bartolomé de Tirajana

Chalma Chicha, bastante discreta desde el exterior en invierno pero una experiencia ohh cuando bajas al restaurante. Muy bonito y confortable. Vengo aquí una y otra vez y siempre me sorprende la comida. No es barato, pero la calidad es buena y la relación precio-rendimiento es buena. Si quieres comer barato, tienes que ir a las tiendas para turistas y comer mala comida para turistas. Aquí se vive una excelente experiencia gastronómica con platos extremadamente sabrosos. Pedimos sopa, entrante, plato principal y postre. La sopa por 11 euros era muy abundante. Los otros platos no eran demasiado ricos, pero encajaban con el concepto y al final estábamos llenos. Los precios son completamente razonables para la calidad. Siempre es un placer. Sólo que esta vez el servicio no fue tan atento como de costumbre. Puedes hacerlo mejor. No hubo dudas sobre su sabor. Pero sigue siendo amigable. Todavía merece la máxima puntuación. Muchas gracias y definitivamente regresaré. Altamente recomendado.

Restaurante delicioso, muy bonito y además la comida y el servicio impecable. Muy acogedor. No se vayan sin probar los postre, sin una maravilla.

Fui con mi hermana el martes pasado. Estaba deseando probarlo porque vi un post de Instagram y sentí curiosidad. Si no hubiera tenido la ubicación y no hubiera visto el post habría pasado desapercibido. Cuando entré fue ganando puntos a cada paso, pequeño, muy acogedor, muy buen recibimiento por parte del camarero. Los platos de la carta al leerlos prometían, y la realidad los superó con creces. Tenían tres opciones; carta, menú degustación, y menú degustación con maridaje. Elegimos carta porque todos los platos sonaban espectaculares y queríamos hacernos nuestro propio menú, desde los entrantes, hasta los postres, pasando por principales. Si la cena fue una experiencia de 10 para el gusto, la vista disfrutó tanto o más ¡Menuda presentación!. El olor tampoco se quedó atrás. Ninguno defraudó, no fuimos capaces de decidir cual fue el "menos rico". Gracias equipo de Calma Chicha, la mejor experiencia gastronómica que he tenido en años. Se merecen ser más conocidos.

Una recomendación muy alta para el menú degustación. ¡Fue celestialmente maravilloso!

No le pongo 5 porque si bien la comida está muy buena,las raciones son súper escasas.Estas pagando un plato y parece que es degustacion.

Maravilloso. De la comida al servicio. Me sentí bienvenido y disfrutó de la creatividad de las porciones. Mi novia comió sopa, que venía en un tazón grande y bacalao, yo comí vieiras en tailandés verde con frutas (interesantes y bien equilibradas) y chuletas de cerdo. Tampoco es demasiado caro. ¡Recomendado!

Me gustó mucho este restaurante, lo sigo en Facebook, así que volví pero esta vez, para “abordar” el menú degustación. Después de una bienvenida informal y fría que me pidió que esperara, aunque había reservado, para acomodar mejor (aunque con unas pocas sonrisas) una mesa de 6 personas; Me cambiarán de mesa dos veces antes de poder finalmente elegir mi menú degustación. La recepción... ¡es la que manda! Breve ! En cuanto a la cocina, un menú de 8 platos. Todo es bueno y agradable al gusto. Sin embargo, para jugar en la liga de los más grandes es necesario revisar algunos detalles. Así que el foie gras (sería más apropiado mousse) podría acompañarse de tostadas. Realmente no olí la trufa negra en el parmentier. El sorbete de pepino, limón y menta que sigue es excelente. Las aceitunas verdes enlatadas con el atún (aunque muy bien cocidas) están realmente malas. La paleta de cordero quedaría genial con un poco más de calor (¡sin cocinar!). Interesante y sorprendente bizcocho fluido de violetas. Servicio impecable (excluyendo jefe).

La comida increíble, la ejecución y originalidad de los platos fueron de primera categoría. Mucho mejor de lo que esperábamos por el precio.

Ya sospechabamos que íbamos a comer muy bien… los años de experiencia del chef le preceden ya en otras propuestas que conocíamos; y realmente nos ha vuelto a entusiasmae. Raciones equilibradas, precios ajustados, tiempos del pase justos y propuestas deliciosas. Por recomendar algún plato: el solomillo y el ceviche buenisimos, el jardin de la alegria, un postre delicioso. Local muy calma chicha. Cerrar los ojos y comer, dejarse llevar por el paladar. No defraudan.

Tuve una comida especial aquí el fin de semana pasado. Empecé con vieiras y lo seguí con el filete, que estaba absolutamente delicioso. Un par de cucharadas de helado de chocolate terminaron todo muy bien. Asegúrate de pedir las papas de trufa. Tuve un tiempo encantador y el personal era genial.